Los 118.884 votos que Miranda Peña obtuvo el pasado 13 de marzo la convirtieron en la figura más importante de la Cámara de Representantes para la próxima legislatura.

De ahí que su apoyo a la candidatura de Gustavo Petro resulte trascendental en un momento en el que más se están moviendo los apoyos políticos en el país. Además, no será solo parte del comité de aplausos de cada discurso, sino también su jefa de debate en Bogotá.

En un video grabado junto al candidato, Miranda anunció que abraza la causa de Petro “por respeto e inmenso cariño a mi electorado y siendo coherente con mis principios y luchas”.

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Según ella, pese a que inicialmente quería mantenerse neutral, “las circunstancias que hoy enredan las campañas políticas, las mentiras, las traiciones, me obligan a tomar una posición”.

“Hemos sido nosotros quienes hemos luchado frente a frente contra la corrupción”, agregó, recordando que ambos coincidieron en algún momento en algunas iniciativas en el Congreso.

Los trinos de Miranda contra ‘Fico’ Gutiérrez

Aunque la parlamentaria se había mantenido neutral públicamente, desde hace tiempo era evidente que se le oponía a Federico Gutiérrez, aunque tampoco se descartaba que pudiera apoyar a Sergio Fajardo.

Eso sí, algunos mostraban que se ponía del lado de Petro. Por ejemplo, cuando calificó de “ridículo” que Gutiérrez fue a hacer anuncios de campaña en la cárcel La Picota, a propósito de la polémica por la visita del hermano del líder del Pacto Histórico a condenados por corrupción.

En Semana Santa también aprovechó para enviarle pullas:

En otro momento comparó la campaña de ‘Fico’ con la del presidente Iván Duque, hace 4 años:

Estados Unidos critica a Petro en la ONU y evalúa si continúa apoyo a Colombia en el Acuerdo de Paz

Estados Unidos lanzó fuertes críticas al presidente Gustavo Petro durante la más reciente sesión del Consejo de Seguridad de la ONU, en la que se presentó el informe trimestral sobre la paz en Colombia. El representante estadounidense, Mike Waltz, acusó al Gobierno de usar “retórica incendiaria” y de impulsar políticas que, según Washington, socavan los avances hacia una paz duradera. Además, cuestionó la ampliación del mandato de la Misión de Verificación, señalando que se ha desviado de su objetivo inicial —la desmovilización de las Farc— para centrarse en lo que calificó como “prioridades políticas excesivas”, como la JEP y el apoyo a minorías étnicas.