El tema lo trae a colación este miércoles el diario Portafolio, que asegura que, supuestamente, los colombianos están desperdiciando dinero con los famosos puntos acumulados.

Según ese medio, esta estrategia de mercadeo pretende fidelizar clientes y el objetivo de las empresas es “brindarles a los compradores un retorno de su compra para obtener un beneficio en su próxima visita al almacén”.

Fuentes dijeron a Portafolio que el cliente que acumula puntos se beneficia, así sea de forma pequeña, de descuentos en nuevas compras y para adquirir algún tipo de electrodoméstico. Sin embargo, la pregunta de muchos es: ¿realmente sí hay un beneficio económico?

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Si bien, los usuarios de benefician (en algo) luego de acumular miles y miles de puntos porque reciben descuentos para nuevas compras o algún tipo de obsequio por parte de los almacenes, lo que muchos desconocen es que detrás hay una estrategia de recolección de datos para que las empresas sepan, entre otras cosas, cuáles son los hábitos de compra de sus clientes, qué les gusta, en qué época compran, qué marcas y cuáles son sus preferencias.

En pocas palabras, cada vez se engorda más la base de datos de información para dar en el punto del gusto del usuario y, obviamente, para facilitar y afinar el mercadeo por parte de las empresas.

Portafolio, a su vez, cita a Santiago Rodríguez, profesor de la Facultad de Administración de la Universidad de los Andes, que asegura que en este tipo de programas se deben tener en cuenta las necesidades reales de los consumidores.

“Acá los clientes deben entender cuál de estos sistemas es el que más le conviene, porque si tiene puntos que los va a convertir en algo que no utiliza, no tiene sentido. Lo importante es estar en aquellos programas que tengan afinidad con usted”, afirmó Rodríguez.

Más allá de lo que puede estar detrás de la estrategia, lo cierto es que estos programas de acumulación de puntos son vistos por buena parte de los clientes como algo bueno, que les entrega beneficio, y los motiva a regresar a cada supermercado o negocio. Además, juega con algo que cada vez reta más a las empresas: mejorar la percepción positiva que pueden tener los clientes de su negocio.