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El 24 de enero de 2024, la Superintendencia de Sociedades admitió a Centro Aseo Mantenimiento Profesional en proceso de reorganización. Sin embargo, alrededor del proceso hay denuncias que aseguran que la empresa, pese a saber que iría a reorganización, consiguió más de $2.000 millones a través del financiamiento de 250 inversionistas.
De acuerdo con los plazos dados por la Supersociedades, Centro de Aseo Mantenimiento Profesional ahora se encuentra en la búsqueda de un acuerdo de reestructuración de deudas.
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Según la información del proceso, durante más de 90 días, la empresa incumplió con el pago de más de $ 13.748 millones a dos o más acreedores. El valor de la deuda representa 33 % del pasivo total de la empresa.
La denuncia, sin embargo, asegura que, pese a que la empresa sabía que iría a reorganización, consiguió $ 2.000 millones a través de ‘factoring’. Este proceso consiste en la venta de facturas a un tercero que adquiere la deuda y la empresa que las vende, consigue liquidez.
La firma Páez Martin Abogados, que representa a los inversionistas, advirtió “que uno de los mayores perjuicios por parte de esta compañía, es que decidió acceder a este modelo de financiamiento a sabiendas de que estaba pronto de solicitar la admisión”.
Los problemas Centro Aseo Mantenimiento Profesional
Centro Aseo Mantenimiento Profesional es una empresa dedicada a los servicios de limpieza, aseo, mantenimiento y suministro de insumos para entidades públicas y privadas. Al momento de entrar en reorganización, contaba con más de 170 clientes y más de 1.560 empleados.
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Pese a la larga historia, en 2023, la compañía empezó a tener fuertes problemas económicos. De acuerdo con la información que entregó a la Supersociedades, hubo cuatro factores que afectaron a la empresa:
- Incremento en los costos de insumos y dotaciones.
- Incremento del salario mínimo frente al incremento de contratos anual.
- Costeo de negocios que genera cierre por pérdidas en algunos contratos.
- Endeudamiento financiero con cuotas que no se cubren con flujo de caja.
Y en el memorial de crisis, Centro Aseos aseguró que adquirió “una deuda considerable para financiar sus operaciones y adquirir equipos y materiales necesarios para satisfacer la creciente demanda de sus servicios. Sin embargo, el alto costo de la deuda y los intereses asociados han impactado negativamente sus márgenes, disminuyendo la rentabilidad y generando pérdidas”.
Así, la empresa vio una caída significativa en sus ingresos, pasando de $7.983 millones en enero a $1.372 millones en noviembre.
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Ante esto, en una reunión de la Asamblea de Accionistas en diciembre, se decidió que se solicitaría la admisión en proceso de reorganización.
“Centro Aseo ha tenido resistencia de proveedores de bienes y servicios esenciales para su operación”, se lee en las minutas del encuentro.
Y a renglón seguido: “la presidente de la reunión propone que la sociedad desista del NEAR (Negociación de Emergencia de Acuerdos de Reorganización) con la finalidad de solicitar la admisión a un proceso de reorganización empresarial”.
La denuncia
Sin embargo, y pese a la situación económica que se vio afectada en 2023, la empresa acudió al ‘factoring’ para conseguir liquidez.
En pocas palabras, el ‘factoring’ consiste en que una empresa le vende a un tercero una factura que se vence en un periodo de tiempo (entre 60 y 90 días, por lo general). Este tercero paga una cantidad menor del valor de la factura (entre el 80 % y el 90% del valor original) que se le adeuda a la empresa. Cuando se cumple el plazo, quien compró la factura, cobra el valor total al acreedor.
“Centro Aseo solicitó el pago anticipado con un descuento de las facturas que le adeudaba a sus proveedores, a una comunidad de inversionistas. Las compraron con el compromiso de recibir su capital nuevamente 100 días después, más la rentabilidad generada”, indicó la firma Páez Martin Abogados. Así, la empresa consiguió $2.000 millones.
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El problema, denunciaron los 250 inversionistas que dijeron creer “en la larga trayectoria de esta empresa colombiana”, es que Centro Aseo acudió al ‘factoring’, aun a sabiendas que estaba pronto a solicitar entrar en un proceso de reorganización.
“Uno de los mayores perjuicios por parte de esta compañía, es que decidió acceder a este modelo de financiamiento a sabiendas de que estaba pronto de solicitar la admisión en un trámite de NEAR, dejando afectados los inversionistas, pues esta ley permite que el pasivo entre como reorganizable sin posibilidad de iniciar la acción ejecutiva correspondiente”, indicó la firma.
Según los representantes de estos inversionistas, “fueron asaltados en su buena fe”. Ante esto, solicitaron a las autoridades que realicen las investigaciones pertinentes para que los afectados recuperen sus recursos.
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