El precio del dólar en Colombia ha logrado máximos históricos lo que ha generado una alerta en los diferentes sectores productivos del país y de la población en general, pues esto significa que inmediatamente se elevan los precios de los insumos importados, lo que a su vez aumenta el costo de producción y por ende suben los precios de los productos finales que salen al mercado nacional, efecto conocido como inflación, por lo que se ve afectado, aún más, el poder adquisitivo de las personas.

Sobre el fenómeno que viene ocurriendo, LA CRÓNICA consultó a Henry Amorocho Moreno, profesor de Hacienda Pública de la Universidad del Rosario, especialista en inflación, crecimiento económico, tasa de cambio, tributación, reforma tributaria, presupuesto, planes de desarrollo entre otros.

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“El precio del dólar ha venido subiendo de manera vertiginosa en estos días por varias razones, unas de tipo internacional y otras de tipo interno. Las razones de tipo internacional vienen asociadas a un aumento de la devaluación de la moneda y tiene que ver mucho con el resultado del precio interno de los alimentos”, expresó el catedrático.

Agregó que hay productos como el café que necesita insumos importados, que hacen que se eleve el precio en el mercado de alimentos, “esto está incrementando la inflación y desde luego va disminuyendo el poder adquisitivo de la moneda y va dejando una estela de dificultades que debido a que el país todavía no se ha recuperado completamente en la parte económica, marca dificultades en la dinámica que venía trayendo el crecimiento de la economía, sobre todo para este segundo semestre”.

Afirmó que no todas las noticias podrían ser regulares, “hay unas muy buenas, por ejemplo, que Quindío y en general el Eje Cafetero es uno de los sectores geográficos del país más beneficiados porque ha tenido dentro de su estrategia de productividad el sector turístico, no solo como estrategia, sino como realidad de explotación económica, considero que el Eje, mientras la tasa de cambio esté alta, va a recibir unos buenos ingresos porque desde luego el territorio ya se viene impulsado hace mucho tiempo como destino turístico y tendrá muy buenas posibilidades de beneficios, pues la alta tasa de cambio deja buenos ingresos en la parte del gasto que vienen a hacer los turistas del extranjero”.

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Aseveró que sin duda otro de los beneficios se verá en el campo de las remesas, pues quienes envían dólares desde el exterior, verá rendir más su dinero por la tasa de cambio que está alta, esto llevará a que las personas que reciban el dinero en esta región tengan más cantidad de pesos.

“Cuando el precio del dólar sube y nuestra moneda se devalúa hay un efecto positivo de la persona a la que le giran el recurso y esa persona va a tener más capacidad de ingreso y va a poder gastar más, va a impulsar la economía local”, Agregó

Así mismo, es un factor que podría motivar la inversión de residentes en otros países, por ejemplo, en bienes raíces como casas, apartamentos, entre otros, lo que dinamizaría el sector de la construcción. 

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Henry Amorocho Moreno manifestó que a pesar de todo, los sectores que son tradicionales como el cafetero, se ven beneficiados, ya que hay precios muy positivos del café y en el momento del cambio, por el aumento en las importaciones, desde luego se favorece mucho a la población que pertenece a este gremio. Quindío y en general el Eje Cafetero se vería beneficiado por el turismo y exportación, especialmente del café.

Frente al hecho de que el Quindío ha aumentado su oferta exportadora con productos como cacao, aguacate hass, limón tahití, entre otros, el experto dijo que “en ese punto tocaría hacer un análisis sector por sector, porque cada uno de estos productos necesita insumos diferentes y tocaría ver si el producto que va a salir con los nuevos costos se hace competitivo a nivel internacional. No se podría asegurar nada, pero lo más probable es que no tengan el mismo comportamiento que un sector tradicional como el cafetero. Habría que esperar cómo evoluciona toda esta situación de la devaluación del peso, que desde luego en las exportaciones influiría favorablemente, pero hay que tener en cuenta el componente de los insumos importados”.

Referente al sector cafetero, el gerente general de la FNC, Roberto Vélez Vallejo, coincidió con Amorocho Moreno e indicó que para la caficultura colombiana, una actividad que es netamente exportadora -casi el 90 %-, el alza en la cotización del dólar representa más pesos que van directamente a los productores en el precio interno del café. “Sin embargo, los insumos agrícolas se van a volver más caros, todos los bienes que provengan del exterior se encarecerán”.

Afectación para el turismo hacia el exterior

Amorocho Moreno reiteró que la inflación disminuye el poder adquisitivo y hay que “ajustar el cinturón” cuando llegan esas dificultades. “Hay que esperar cómo va a resultar la política pública del presidente electo de Colombia, porque la inflación se cura atendiendo los sectores reales de la economía, impulsando el agrícola y el industrial, que han estado bastante rezagados en los últimos tiempos. Desde luego, sí se presentaría una dificultad porque la pérdida de ingresos que se genera por la inflación incidiría directamente en gastos que ya no podría hacer la gente comúnmente, las personas tendrían que ajustar sus presupuestos y decidir entre comer o viajar, por lo que el turismo hacia el exterior se vería muy afectado.

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Aún así, dijo que el turismo interno podría verse beneficiado, porque muchas personas que aún tengan poder adquisitivo para unas vacaciones y que planeaban hacerlo viajando a otros países, van a preferir hacerlo en el territorio nacional para no gastar tanto dinero.

En ese sentido, Anato manifestó su preocupación por el alza del dólar, una situación que ha generado que los paquetes turísticos aumenten su precio, debido a una devaluación anual del 14,98 % del peso frente a la divisa americana.

“Lo anterior, significa un mayor costo que tendrían que asumir los turistas al momento de viajar hacia el exterior, sumado a una inflación internacional”, aseveraron desde la entidad.

Por su parte, Paula Cortés Calle, presidente ejecutiva de Anato, aseguró que pese a estas condiciones, “destacamos que esta será una gran oportunidad para seguir fortaleciendo el turismo interno y receptivo, que los colombianos viajen por su país, de promocionar nuestra biodiversidad y de incentivar a que más extranjeros nos visiten”.