Así lo da a entender el informe “Moderada recuperación del empleo en 2021 y dinámica de las vacantes en oficios automatizables durante la pandemia” publicado por el Banco de la República. 

Con una implementación permanente del teletrabajo y la reducción de puestos presenciales, algunos sectores que son netamente físicos podrían sufrir serias reducciones en sus puestos de trabajo en Colombia, advierte el documento.

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Los operarios de máquinas, los artesanos, el personal de aseo, los auxiliares de obras de minería, los empleados indirectos de la construcción e industrias similares y hasta los informales, como los vendedores ambulantes, serían algunos de los sectores que sufrirían estos recortes y hasta una posible desaparición, resalta el análisis laboral. 

Esto, debido a que la naturaleza de su trabajo, al estar ligada a trabajos que sí se pueden hacer desde la casa, se convertirían en prescindibles físicamente, agrega el Banco de la República. 

Por supuesto, la disminución de puestos de trabajo en sectores formales o informales podría llevar a efectos sobre la economía, como una mayor tasa de desempleo a largo plazo, agregó el informe. 

Por otra parte, los trabajos que requieren profesionales especializados (que puedan teletrabajar), técnicos e ingenieros que pueden desempeñarse desde su casa y comerciantes que puedan adaptarse a la virtualidad serían los que sufrirían menos el coletazo del mundo laboral postpandemia, destaca el análisis. 

“La estrategia del teletrabajo no implica en sí una destrucción directa de los actuales empleos, pero sí permite un cambio en la estructura de las empresas que, debido a las restricciones de bioseguridad, se han inclinado hacia una mayor demanda por ocupaciones teletrabajables”, apunta el informe publicado por el Banco de la República.