De espaldas Iniesta recibió un balón al borde del área del rival, donde luego de controlar, se dio la vuelta, deshaciéndose del defensor que lo marcaba, dejó en el camino al arquero y lanzó al arco, reviviendo la magia que había mostrado en el Barcelona.

Más adelante, su compañero Kyogo Furuhashi amplió la ventaja para el equipo del español, pero el rival Kengo Kawamata descontó desde el punto penal, para un marcador final de 2-1.

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El exjugador ‘culé’ no había tenido un buen inicio en el campeonato de Japón, pues en el primer partido fue suplente y, aunque ingresó en el segundo tiempo, su equipo perdió 3-0 ante el Shonan Bellmare.