Desde el 2013, el atacante británico empezó a hacerse camino dentro de los Spurs al no ser cedido; bien hicieron los de Londres, ya que cultivaron a uno de los mejores jugadores de su historia.

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Harry Kane inició de lleno con el Tottenham luego de ser cedido a varios clubes: Leicester City, Norwich City, Millwall e incluso el Leyton Orient de tercera división fueron los equipos que acogieron al joven Kane en su etapa de desarrollo. Luego de 3 años de cesiones, los londinenses apostaron por el espigado delantero, ingresando en la plantilla para la temporada 13-14.

A partir de ese año, el mismo Harry se encargó de nunca más volver a ser menospreciado y ser enviado a préstamo. Kane ya casi acumula una década en el Tottenham, tiempo en el que desafortunadamente los títulos no han estado a su favor.

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Lo que sí ha estado presente fueron sus goles, de hecho, con su tanto convertido ante el Manchester City el pasado domingo, Harry Kane se convirtió en el máximo anotador histórico de los Spurs, acumulando la impresionante suma de 267 goles.

La presencia de esta leyenda en la nómina londinense ha sido de vital importancia para que el club recuperara prestigio en el fútbol europeo, siendo subcampeones de Premier League en varias ocasiones y quedando a las puertas de levantar la Champions League en 2019.

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Harry no solo es una inspiración en su club; en los ´Leones´ también es el máximo anotador, registrando 53 goles. Sin duda alguna, Kane ha marcado un antes y un después en el fútbol inglés, ahora lo único que necesita para entrar al olimpo es levantar un título importante, lo cual hasta este momento no se le ha podido dar.