Salvador Cabañas, de 43 años de edad y quien convive con un proyectil en la cabeza debido a un atentado del que se salvó en 2010, promocionó su reaparición en canchas aztecas con una entrevista concedida a Telediario Monterrey, donde aclaró todo lo que se ha hablado de su vida.
Sobre su retiro y el fin de la fama explicó que hubo personas que le dieron la espalda: “Los amigos verdaderos siempre van a estar contigo, pero los que estaban por el dinero ya se fueron, y se aprovecharon mucho”.
Sin embargo, detalló que de su pareja y empresario recibió el golpe más fuerte y a la vez, inesperado.
“De todo, lo que más me dolió fue la traición de mi propia esposa y de mi representante, los 2 estaban hablando y yo no sabía nada; aparte, él era mi compadre”, manifestó.
Y pese a lo difícil de la situación, expresó que no les guarda rencor, ni a ellos ni a quien casi lo mata: “Los perdono y no tengo ningún problema en decirlo. De hecho, a mi expareja siempre le digo que la perdono porque la tengo que ver por mis hijos”.
Salvador Cabañas no fue panadero
Finalmente, explicó que no pasó malos momentos económicos y que es falso que se hubiera empleado como panadero para subsistir en Paraguay.
“Eso nunca pasó; una vez fue la prensa a casa y me dijeron que querían una foto conmigo en la panadería de mis padres y yo accedí. Al otro día dijeron que yo estaba trabajando ahí”, enfatizó.
Y cerró aclarando que no tiene problemas de plata: “Yo tengo muchas cosas que me generan dinero en Paraguay mensualmente”.
“Tengo dinero”: Salvador Cabañas
En video, las palabras del exfutbolista guaraní (desde el minuto 6:26):
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