Lo más extraño de la situación es que previo a la bochornosa pelea, no hubo ningún roce o acción de juego fuerte entre los futbolistas. Es más, los dos hacían parte de un mismo equipo en el ejercicio táctico que se realizaba en la cancha.

Sin razones claras y mientras el balón circulaba por otra zona del campo, Insaurralde y Silva comenzaron a discutir, y de las palabras pasaron a los puños y patadas. Sus compañeros de inmediato fueron a separarlos.

“Los dos afuera. Los dos a la mierda y si quieren no vuelvan más. Qué mierda se creen que estamos haciendo acá. La puta madre, váyanse los dos”, fue la reacción del DT Guillermo Barros Schelotto, narra TyC Sports.

Insaurralde, en el 2010, había tenido una pelea en un entrenamiento con otro compañero de Boca, Jesús Méndez. En esa ocasión, la pelea se originó por una fuerte entrada del jugador reincidente a su colega, recuerda Olé.