Su fallecimiento se dio a conocer mediante un comunicado publicado en la cuenta de Twitter de la Barra 25, organización de hinchas fundada hace 49 años.

Ramírez, era uno de los fanáticos más reconocidos de Santa Fe, participó constantemente en los eventos especiales del equipo y tuvo el privilegio de hacer saques de honor en El Campín.

Gerardo Bedoya

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Su barra institucionalizó la popular corneta del ‘ta-ta-tá’ que suena en todos los partidos desde el segundo piso de la tribuna oriental y que se convirtió en símbolo de la afición.

Vivía en el barrio Tabora de Bogotá, vio todos los títulos del ‘Expreso rojo’ y en su pastelería se elaboró durante más de un mes el célebre ponqué gigante con el que Santa Fe festejó sus 50 años.

Ramírez es uno de los personajes que sin ser jugador, entró a la historia albirroja, donde siempre permanecerá. Paz en su tumba.

“¡Gracias por tanta lealtad, amor y paciencia! Su legado permanecerá por siempre en la historia del club… #TATATA”, trinó Santa Fe tras la lamentable noticia.

Acá, el comunicado en cuestión:

Así se pronunció Santa Fe: