Es uno de los técnicos más importantes en el fútbol colombiano, sus métodos son admirados por unos y criticados por otros. Su pasado como futbolista es poco conocido y alguna vez decidió “colgar los guayos”, pero seguir enfocado en el fútbol. Alguna vez compartió con Carlos Valderrama y el ’10’ se inspiró en el ‘look’ del risaraldense.

Juan Carlos Osorio nació en Santa Rosa de Cabal en 1961 y desde niño lo inscribieron a una escuela de fútbol, aunque inició queriendo ser arquero. A los 11 años se marchó a Pereira, siguió jugando hasta que se graduó del Colegio Calasanz. Su papá le sugirió, o casi que lo obligó, entrar a la universidad y viajó a Bogotá a matricularse en el Colegio Odontológico. Sin embargo, eso no era lo suyo y decidió regresar a Pereira para cumplir su sueño de futbolista.

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Osorio ya era un volante mixto y fue campeón con la Selección Risaralda. El que siempre lo apoyó fue su abuelo materno, Arturo Arbeláez, personaje por el que nombraron el estadio de Santa Rosa de Cabal. A Eduardo Retat lo contrataron como técnico de la Selección Colombia Sub-20 y en una preconvocatoria para disputar el Sudamericano de 1981 llamó a Juan Carlos Osorio. En esa época no era tan común que los jóvenes menores de 20 años hubieran debutado como profesionales.

El equipo contaba con futuros jugadores reconocidos como: Hernán Torres, Carlos Mario Hoyos, Santiago ‘Sachi’ Escobar, Juan Jairo Galeano y Armando ‘Piripi’ Osma. Pero el más talentoso era un samario de pelo amarillo: “A Carlos [Valderrama] le impactó que yo tenía dos aritos y todo eso que él se pone acá [cuello] y las manos, me encrespaba el pelo y jugaba con guayos blancos como el ‘Pañaña’ Barreto. A Carlos le llamó mucho la atención. Recuerdo que en la primera noche en la convocatoria le hice el orificio, en ese tiempo con aguja e hilo, porque no había la famosa pistola, y eso había que pasárselo uno con saliva y hielo para que no se le fuera a infectar. Con Carlos nos reímos mucho de eso”, recordó Osorio en el programa ‘Primer toque’ de Win Sports en 2020.

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Al final, Juan Carlos Osorio no quedó en la lista definitiva y continuó vendiendo artículos deportivos en el Almacén Vikos y entró a la reserva del Deportivo Pereira. En Ecuador la Tricolor tuvo un mal Sudamericano y no ganó ningún partido. Osorio pudo debutar con los ‘matecañas’, pero no tuvo muchas oportunidades y además sentía un trato despectivo por parte de los directivos. De otro lado, el ‘Pibe’ Valderrama sí logró consolidarse en el Unión Magdalena y volverse un símbolo del fútbol colombiano.

El risaraldense prefirió acabar su sueño futbolista y se marchó a Estados Unidos para estudiar Ciencias del Ejercicio y Rendimiento Humano. Así inició la preparación de Juan Carlos Osorio y en 1997 viajó a Liverpool para especializarse en Ciencias del Fútbol. El propio ‘Pibe’ Valderrama ha criticado fuertemente el método de Osorio con las rotaciones, pero mantienen una buena relación y el nacido en Santa Rosa de Cabal le dejó su marca al perforar la oreja del ’10’.