“Yo no puedo decir eso, sería muy ególatra”, expresó Mejía en su diálogo con Farouk Caballero donde dejó clara la fecha del 23 de diciembre como la de su final en ‘El pulso del fútbol’.

“Ya se verá que a los dos meses me han olvidado, la audiencia es así”

Asegura que una vez deje el programa tampoco lo oirá. “Tomaré la misma actitud de (Hernán) Peláez. Hasta aquí llegué, hasta aquí escucho. Peláez no oye La Luciérnaga ni El Pulso, porque pensaría “yo lo hubiese hecho diferente” y así lo haré yo”, agregó Iván en El Espectador, donde destacó que hoy el programa que comparte junto a César Augusto Londoño en Caracol Radio tiene más audiencia que nunca.

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Precisamente, en ‘El Pulso’ de este lunes 26 de febrero, al leer el comentario de un oyente que le pedía a Mejía postergar unos años su retiro, este simplemente declaró que no se comprometía a nada.

En El Espectador había sido mucho más contundente:

“Me iré este año si todo sale como está previsto, me voy feliz de haber hecho una profesión bonita. Me voy feliz de haber logrado un respeto, una credibilidad y unos niveles grandes de audiencia por donde he pasado. Me me voy feliz de haber podido encontrar, sin ser un profesional de universidad, una forma de ganarme la vida, de vivir bien, de darle estudio y de darles todo lo que he podido a mis hijos. Estoy inmensamente agradecido con toda la gente que me soportó y con toda la gente que no me soportó, pero me ayudó a seguir”  

El periodista recordó su llegada a los medios, más exactamente a La Patria de Manizales, gracias a Javier Giraldo Neira, al que aprovechando que era novio de una prima suya le pidió una credencial para entrar gratis al estadio con la condición de que al final le contara cómo estuvo el partido; luego, cuando estando apenas en grado 11, Wbeimar Muñoz le dio su primera oportunidad en la radio, y después cuando Carlos Arturo Rueda, otro histórico del periodismo deportivo colombiano, lo convocó para laborar en El Periódico, de Bogotá.

Para Mejía, hoy la profesión está en crisis porque “hay mucho nuevo y muy pocos preparados. Hoy quieren aprender a ver fútbol con Google y Google no te enseña a ver fútbol”. Por eso insiste en recomendar preparación a las nuevas generaciones que se dedican al oficio.

“Muchos jóvenes hablan de todo, no se especializan en un tema y creen que hacer buen periodismo es tener el whatsapp de Falcao o de James”

“Algo tenemos. Tenemos conocimiento, la gente a mí me oye y me cree. También me insulta, pero me oye y me ve. Las encuestas, sin querer ser petulante ni agrandado, dicen que los referentes somos los mismos y tenemos la mayor aceptación”, agrega el comunicador al respecto de por qué los de siempre siguen mandando la parada en  materia del comentario.

En cuanto a la clave de su éxito, Mejía piensa que también se debe a corroborar y estar seguro de decir lo que está diciendo. Como ejemplo, puso al expresidente de la Federación Colombiana de Fútbol Luis Bedoya:

“Cuando todo el mundo idolatraba a Luis Bedoya yo me cuestioné: ‘¿nosotros quintos en el mundo y con esos partidos tan raros, cobrando una miseria?’ Si hubo alguien que pregonó dos o tres años antes lo que estaba haciendo Bedoya fui yo”, señala orgulloso de su criterio y dejando en el aire que actualmente no come entero sobre los manejos que se le dan a la Dimayor, y en general al fútbol colombiano.