El ciclista africano del equipo Intermarché se impuso en el embalaje de la décima etapa del Giro de Italia, que se disputó entre Pescara y Jesi, de 196 kilómetros. El español Juan Pedro López, del Trek, siguió como líder.

Biniam Girmay, de 22 años, derrotó en el remate a Van der Poel y levantó los brazos con un tiempo de 4 horas 32 minutos 7 segundos, mientras que en la tercera plaza llegó el italiano Vincenzo Albanese (Eolo Kometa).

Sin embargo, en el momento de la celebración vivió un inaudito accidente por el que peligraría su continuidad en la competencia, luego de vivir una alegría en una de las grandes carreras del ciclismo mundial.

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De acuerdo con información de la agencia EFE, Girmay terminó en un hospital tras la ceremonia que le encumbró como ganador, ya que recibió en el ojo izquierdo el impacto del corcho de la botella de la champaña con que se homenajea todos los días en el podio al vencedor.

El ciclista recibió las flores e inmediatamente se inclinó para descorchar la bebida reservada para el ganador. El tapón salió despedido antes de que el corredor se levantara y le golpeó con fuerza.

Tras bajar del podio, comentó a sus asistentes que apenas podía ver por ese ojo y fue transportado al hospital Carlo Urbani en Jesi. Según información de Espn Ciclismo, “aparentemente no podría largar en la etapa 11”.

Un episodio similar ocurrió al final de la primera etapa, la Budapest-Visegrad, con Mathieu Van der Poel como protagonista, aunque el neerlandés tuvo más suerte, ya que la gorra le protegió y el corcho le dio en un pómulo antes de salir volando.

Esta fue la publicación con la que el canal deportivo informó de lo que sería un triste final para Biniam Girmay luego de vivir uno de los grandes momentos de su carrera ciclística.

 

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