Tan solo habían transcurrido siete minutos cuando se dio la acción polémica, en la que un atacante chileno atacó desde la derecha y al llegar al área quebró hacia el medio. Un defensa se arrojó al suelo y la pelota le pasó por debajo del brazo, rozándolo y rozando las costillas.

Roldán juzgó que el balón había tocado el brazo, claramente abierto pese a que el jugador iba en plancha casi a ras de suelo, por lo que pitó la pena máxima.

Pese a los reclamos, Fernando Cordero anotó desde los 12 pasos y puso arriba a los de Concepción apenas a los 9 minutos de juego.

Al final el partido terminó con marcador de 3-3 con gol agónico de Libertad al minuto 90 +2′. De cualquier manera, la victoria de los argentinos de Godoy Cruz sobre Sporting Cristal por 2 a 0 terminó asegurándole el cupo a los paraguayos a la siguiente fase del torneo, dejando en un segundo plano el error para los perjudicados.

Este es el resumen del juego, en el que la primera acción de juego es la polémica jugada juzgada como penal por el colombiano:

Roldán había estado en medio de la polémica en Colombia hace días, cuando pareció pedir la intervención del VAR en medio de una jugada polémica del partido entre Bucaramanga y Santa Fe, pese a que esa tecnología no está todavía implementada en el fútbol colombiano.

Wilmar Roldán

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Lo más curioso es que incluso con las tremendas dudas que suscitó su decisión, que favorecía al equipo universitario en su momento, y pese a que incluso expulsó justamente a uno de los paraguayos a poco del final, el técnico chileno Francisco Bozán terminó muy enojado con Roldán al final del encuentro y hasta le hizo un gesto acusándolo de vendido:

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