De las muchas curiosidades que puede despertar tener un microscopio en las manos, esta creadora de contenido se decidió por la de mostrar su rostro y parte de su cabello muy de cerca, tanto así que aparecieron vellos negros en su nariz, que no fue capaz de observar a simple vista.
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Aunque estaba recién depilada, la mujer encontró vellosidades que no quisieron despegarse de su piel, uno que otro punto negro (espinilla), excesos de maquillaje mal difuminado, suciedad y sudor.
Cuando se adentró un poco en su cuero cabelludo, encontró que los 4 días que llevaba sin lavarse el cabello ya se hacían más que evidentes, este se veía incrustado (como si fuera un conjunto de árboles) y aprovechó el momento para buscar una cicatriz que le dejó una operación a la que fue sometida de pequeña.
Este es el video completo de la exploración:
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