Aunque algunos ven las venas varicosas o arañas vasculares como un problema estético, para otras personas puede provocar un gran dolor o malestar y convertirse en un problema de salud más grave, señaló Mayo Clinic.

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Frente a esto, la Clínica Nostra Senyora del Remei dijo cuáles son los ‘tips’ para prevenir, controlar y reducir las probabilidades de que aparezcan este tipo de venas en la superficie de la piel.

  • Mover las piernas: evitar pasar mucho tiempo de pie y darle un descanso periódico a las piernas con paseos cortos o ejercicios específicos.
  • Hacer deporte: caminar es el ejercicio que trae más beneficios a la circulación venosa. Sin embargo, también se puede montar bicicleta, nadar, correo o bailar. La actividad física siempre debe hacerse con calzado cómodo.
  • Evitar fuentes de calor: la depilación con cera caliente, los suelos con sistemas de calefacción radiante, ‘jacuzzi’, saunas y exposición al sol continuamente.
  • Dieta rica en fibra: hay que consumir aproximadamente 1,5 litros de agua al día y limitar las grasas saturadas como embutidos y mantequilla.
  • Elevar las piernas: levantar unos 10 o 15 centímetros la parte baja de la cama para mejorara el retorno venoso mientras se descansa o se duerme.
  • Activar circulación: contraer los músculos de las pantorrillas o ponerse de puntillas repetidamente cada cierto tiempo.
  • Zapatos cómodos: evitar tacones altos y zapatos planos.
  • Duchas: que siempre sea con agua fría.
  • Evitar fajas: no es recomendable usar ropa demasiado apretada.
  • Masajes: además de la hidratación, es importante masajear las piernas desde el pie hasta el muslo, de abajo hacia arriba.

Por qué salen las venas varices

De acuerdo con Mayo Clinic, existen unos factores que pueden aumentar el riesgo de tener venas varicosas o arañas vasculares, algunos de ellos son:

  1. Edad: el envejecimiento causa un desgaste natural de las válvulas de las venas que ayudan a controlar el flujo sanguíneo.
  2. Sexo: las mujeres son quienes tienen más probabilidad de adquirir esta enfermedad por los cambios hormonales que se dan durante la menstruación o menopausia. Las píldoras anticonceptivas también aumentan el riesgo.
  3. Embarazo: el volumen sanguíneo aumenta para el desarrollo del bebé, pero también puede terminar agrandando las venas.
  4. Antecedentes familiares: si otros familiares tienen venas várices, aumenta la probabilidad de padecerlas.
  5. Obesidad: tener sobrepeso aumenta la presión en las venas.
  6. Estar de pie o sentado por largos periodos de tiempo: el movimiento es el que ayuda a que la sangre circule.
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La situación puede volverse más compleja y hay que prestar mayor atención cuando se presenten úlceras, coágulos sanguíneos y sangrado, aseguró el portal especializado Mayo Clinic.

De igual forma, para saber si se padece de esta enfermedad las personas pueden tener en cuenta los siguientes síntomas:

  • Sensación de dolor o pesadez en las piernas.
  • Ardor, calambres musculares o hinchazón.
  • Picazón alrededor de una o más venas.
  • Dolor después de estar sentado o de pie por un largo periodo de tiempo.
  • Cambios en el color de la piel alrededor de las venas.
  • Venas que parecen retorcidas.
  • Venas de color violeta o azul.

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