En la nueva Sede Educativa de Comfenalco, ubicada en Girardot, hay dos bicicletas paleteras expuestas con un aspecto bastante peculiar. Tienen tres llantas cada una y en vez de sillines, sobre lo que serían los cuadros, sostienen dos pequeñas casas que, a simple vista, parecen sacada de un bosque porque están hechas de madera bruñida, pero que al detallarlas dejan entrever que están armadas al golpe de un montón de cajones que se abren según la curiosidad de quien se les pare al frente.

Esos cajones están llenos de insectos, el grupo de animales más abundantes dentro del ecosistema terrestre con una representación de hasta el 80% de las formas de vida que habitan la Tierra.

(Vea también: Cuevas y cascadas de otro mundo, las maravillas naturales a pocas horas de Bogotá)

Guardan mariposas, escarabajos, libélulas, maría palitos, mantis religiosas, grillos, avispas, hormigas, moscas, cucarachas, arañas y abejas organizadas por sus tipos de habilidades, por sus funciones y por sus historias naturales, tal y como se aprecia en el recorrido guiado que conversa con los espectadores a través de explicaciones dispuestas sobre los vidrios de cada gaveta.

Es decir, estas bicicletas y estas casas son la vitrina de Bichomóvil, una muestra itinerante de mediano formato “que busca cambiar la manera de percibir a los insectos, de educar sobre su evolución, sobre su rol en el ecosistema, y sobre las adaptaciones y los diseños que han desarrollado sobre su cuerpo para permanecer dentro de la evolución”, explica Ana Cristina Berrío, analista de fomento a la creación del Departamento de Cultura de Comfenalco.

Además, a la exposición la acompañan siete carteles de tamaño considerable con macrofotografías de Daniel Mülleman en los que se resaltan la importancia de cada especie para la biodiversidad, y es que si existe es gracias, primero, al trabajo de muchas manos.

(Vea también: La jugada para que los 15 días de vacaciones sean 40; festivos en Colombia son la clave)

De este fotógrafo, por ejemplo, del trabajo conjunto del museo entomológico del Parque Ecológico Piedras Blancas y del área de Artes Plásticas de Comfenalco que fueron los que conceptualizaron la idea y lideraron la narrativa y la investigación; de artistas de Mesaestandar que se encargaron del diseño de la instalación; y del movimiento cultural Taller Tortuga de Envigado, que fueron quienes dirigieron su producción.

Y segundo, a que “en el Hotel y Parque Ecológico Piedras Blancas está ese museo entomológico con una colección muy potente, son más 15.000 especímenes de toda Colombia, y nuestro objetivo fue desde el primer momento acercar ese conocimiento a la gente, aprovecharlo para hacer divulgación científica y para convertirlo un recurso en materia de educación ambiental”, cuenta Berrío.

El Bichomóvil, que está rodando por todo Medellín desde el 2016, y que ha pasado por instituciones educativas, bibliotecas, museos, parques ecológicos, centros comerciales, estará exhibido hasta el 16 de marzo en pleno centro de la ciudad.

Lee También

¿Cuál es la importancia de los insectos dentro del ecosistema?
Según el biólogo y gestor de fauna del Hotel y Parque Ecológico Piedras Blancas, Juan David Marín, su importancia radica en una gran variedad de funciones que son fundamentales para el equilibrio y el correcto funcionamiento de los ecosistemas. Funciones como polinizar, reciclar, tener un lugar dentro de la cadena trófica, servir como descomponedores de materia orgánica y ser dispersores de semillas, por ejemplo.