A través de Instagram, el hombre compartió una foto de lo musculoso que lucía antes de infectarse, y otra de lo delgado que quedó por culpa del coronavirus.

“Quería mostrarles a todos lo grave que puede ser estar sedado durante 6 semanas con un respirador”, manifestó el sujeto en esa publicación.

El hombre, que trabaja como enfermero en San Francisco, también contó que “entre otras cosas”, el COVID-19 le produjo neumonía y por eso perdió capacidad pulmonar.

Mike añadió que ahora planea recuperar el cuerpo que tenía.

Esta es la publicación: