La investigación que fue revelada hace pocas horas por Techcrunch, en la que se dio a conocer que en 2016 la red social de Mark Zuckerberg le pagaba jóvenes y adultos entre los 13 y 35 años con un valor de US$ 20 mensuales por acceder a sus datos, Apple tuvo que salir a dar declaraciones al respecto y afirmó que dichas prácticas violaban sus políticas.

Tras este hecho, las versiones anteriores de Facebook, Instagram o Messenger, según The Verge, dejaron de funcionar en iOS, al igual que otras herramientas que tenían los empleados de la red social de Zuckerberg.

De acuerdo con Recode, a esto se suma una declaración del representante de relaciones públicas de Apple que señalan lo siguiente:

“Facebook ha estado usando su membresía para distribuir una aplicación de recopilación de datos a los consumidores, lo cual es una clara violación de su acuerdo con Apple. Cualquier desarrollador que use sus certificados empresariales para distribuir aplicaciones a los consumidores tendrá sus certificados revocados, para proteger a nuestros usuarios y sus datos “.

Sumado a esto, The Verge explica que, al revocar un certificado, esto evita que las ‘apps’ se distribuyan en iOS y no permite su funcionamiento.

Hombre viendo Facebook.

Artículo relacionado

¿Por qué Facebook les estaba pagando a jóvenes por acceder a sus datos?

Por las denuncias que se presentaron, Facebook se contactó con Pulzo y emitió el siguiente comunicado al respecto:

“Al igual que lo hacen muchas otras empresas, invitamos a las personas a participar en estudios para identificar aspectos que podemos mejorar en nuestros servicios”, dando a entender que las prácticas realizadas a sus usuarios eran con el objetivo de saber cómo usan sus dispositivos.

 

“Informamos detalladamente acerca del tipo de datos que recopilamos y sobre cómo pueden participar. No compartimos esta información con terceros y las personas pueden abandonar el estudio en el momento en que lo deseen”, señala el comunicado.

Además,  sobre el artículo de Techcrunch, explicaron que menos de el 5 % de los participantes adolescentes tenían el permiso de su padres para hacer el estudio.

“Algunos aspectos clave de este programa de investigación de mercado están siendo ignorados. Al contrario de lo que indican los primeros informes, no había ningún ‘secreto’: literalmente fue nombrado Facebook Research App. No se trató de ninguna clase de “espionaje”, ya que todas las personas que participaron en el programa atravesaron por un claro proceso de inscripción, que solicitaba su permiso y estipulaba el pago por su participación”.