La Comisión Australiana de Competencia y Consumo (ACCC) demandó a Apple ante el tribunal federal australiano y ahora deberá pagar la suma de 6,6 millones de dólares, debido al problema que presentaron múltiples celulares y tabletas en 2016  con el “error 53”, que aparecía con una actualización de iOS y dejaba inhabilitados miles de dispositivos, según informó Fayerwayer.

Sarah Court, comisionada del caso, también dijo que Apple no reparó los productos afectados, cuando los clientes tenían el derecho a que la empresa arreglara o remplazara los equipos gracias a la ley australiana del consumidor.

El artículo continúa abajo

Ante esta situación, la filial de Apple en Australia se defendió diciendo que sus usuarios habían utilizado un servicio técnico ajeno a la empresa, por lo que no debían responder por los daños causados.

Gracias al fallo a favor de los consumidores del país oceánico, Apple deberá no solo pagar la multa, si no también poner en práctica un programa para compensar a los clientes engañados.