Confieso que algunos de los libros que hoy les presento en esta humilde lista no los he reseñado aún, porque a veces el espacio no alcanza… y el tiempo tampoco. Así mismo hay muchos más libros que he leído este año pero que fueron publicados años atrás, que me han gustado mucho pero, definitivamente, estaba obligada a hacer una elección final en función de algún criterio. Son obras que llegaron a Colombia en 2020.

El listado se encuentra acotado, obviamente, a aquellos libros y autores que leí, y no a los que quiero leer y que no he podido por física falta de tiempo, v.gr. los últimos libros de Pérez Reverte, Javier Moro, Isabel Allende, Juan Gabriel Vásquez, entre otros. La poesía no está en el listado, por una decisión totalmente arbitraria de mi parte.

Migraciones: Estos 3 libros, cada uno desde una perspectiva y país diferentes, nos adentran en hondas reflexiones sobre los que se van y los que se quedan, y la condición de legalidad y/o ilegalidad de aquellos que se atreven a partir:

  • Como polvo en el viento, del cubano Leonardo Padura (2020, Ed. Tusquets)
  • Cuando éramos felices pero no lo sabíamos, de la colombiana Melba Escobar (2020, Ed. Seix Barral)
  • Desierto Sonoro, de Valeria Luiselli (2019, Ed. Sexto Piso) 

No ficción, ensayos y algo más: Dentro de los mejores libros de no ficción y ensayos… o más que ensayos, tuve el privilegio de leer la edición actualizada de un clásico escrito por Adela Cortina hace más de 20 años, Aporofobia, el rechazo al pobre: Un desafío para la democracia (2018, Ed. Paidós). Imperdibles son también El infinito en un junco de la española Irene Vallejo (2020, Ed. Siruela), Premio Nacional de Ensayo 2020 en España, un libro sobre la historia de los libros, desde los libros de humo hasta los de arcilla, piedra, juncos, seda, piel, árboles, plástico, luz…, y Otro fin del mundo es posible (2020, Ed. Ariel) del brillante colombiano Alejandro Gaviria, con reflexiones magníficas sobre el presente y el futuro, inspiradas en Aldous Huxley.

En Novela histórica, La madre de Frankenstein, de Almudena Grandes (2020, Ed. Tusquets), del ciclo de los Episodios de una Guerra Interminable, narra la extraordinaria historia de Aurora Rodríguez Carballeira, una mujer paranoica y parricida, a través de cuyo pasado y presente – el presente literario, no el presente actual, recrea la época del franquismo de los años 50, la situación de la psiquiatría española en el mismo período y la exclusión y ocultamiento de quienes eran considerados incapaces e inútiles en la sociedad de entonces.

Con Aquitania, de Eva Garcia Sáenz de Urturi (2020, Ed. Planeta), Premio Planeta 2020, nos adentramos en la historia de Leonor de Aquitania, “la madre de Europa”, una mujer excepcional, reina de Francia e Inglaterra, una de esas pocas y asombrosas mujeres de avanzada en pleno medioevo.

Y finalmente, Y Julia retó a los dioses, De Santiago Posteguillo (2020, Ed. Planeta), que es la segunda parte de “Yo, Julia” (2014, Ed. Planeta), la asombrosa historia de la emperatriz romana Julia Domna.

En ficción latinoamericana, definitivamente recomiendo leer Salvar el fuego (2020, Ed. Alfaguara), del mexicano Guillermo Arriaga, el creador de las exitosas películas Amores Perros, 21 gramos y Babel, una cruda historia, ¿de amor?, entre los dos Méxicos evidentes: el aristócrata, y el narco-criminal: “Marina es una coreógrafa, casada, con tres hijos y una vida convencional. José Cuauhtémoc proviene de los extremos de la sociedad, un homicida condenado a cincuenta años de cárcel (…) Entre ambos se desarrolla una relación improbable. Poco a poco, ella entra en un mundo desconocido y brutal hasta que desciende a las entrañas mismas del fuego.”, dice la reseña que hace la misma editorial. Un libro trepidante que espero poder reseñar pronto.

La Carnada (2020, Seix Barral), de Ernesto Carrión, nos introduce al mundillo de los jóvenes la alta sociedad guayaquileña, sus desmanes, sus culpas, y un destino inexorable de la mano de su protagonista, un ícono de dicha clase social que regresa a su país a morir de cáncer, a expiar sus culpas y a descubrirse a sí misma.

Los siguientes 5 libros nos harán reflexionar sobre lo profundo de los duelos, amorosos y de la vida:

Río muerto (2020, Ed. Alfaguara), de Ricardo Silva, la más bella y amorosa novela de la violencia reciente en Colombia; Inquietud (2020, Poklonka Editores), del noruego Kenneth Moe, magníficos relatos desgarrados de un amor ya ido; El padre de la niña muerta (2020, Ed. Planeta), ópera prima del brasileño Tiago Ferro, libro que comenzó a escribir después de que tuvo lugar la muerte de su hija Manu, de 8 años, en abril de 2016 y que relata la infinitud del dolor de ese duelo; Otra menos (2018, Ed. Cuadernos Negros y El Espectador) de Santiago Jiménez Quijano,  la dolorosa historia, desde el punto de vista del padre de la víctima, de la violación y asesinato de Yuliana Samboní en Bogotá a manos del aristócrata arquitecto bogotano Rafael Uribe; Lo que no borró el desierto (2020, XXX), de Diana López Zuleta, un valiente y desgarrador testimonio de dolor y lucha por develar la verdad sobre el asesinato de su padre – Luis López Peralta- a manos de grupos políticos y paramilitares de la costa norte de Colombia, por atreverse a denunciar por corrupción al hoy preso gobernador Kiko Gómez.

No podían faltar los cuentos y relatos: Andrés Neumann, Anatomía sensible (Páginas de Espuma 2020) y La ciudad de vapor (2020, Ed. Planeta), el libro póstumo de Carlos Ruiz Zafón, en cuyos cuentos podremos hallar claves de su tetralogía de El Cementerio de los libros olvidados y unos relatos adicionales que no tienen que ver con la tetralogía pero todos están atravesados por un mismo hilo: el ambiente misterioso de esa Barcelona oculta a los ojos del turista.

Finalmente, y para cerrar esta lista, no dejen de leer La buena suerte (2020, Ed. Alfaguara), de Rosa Montero en el cual, a través de la historia que se entreteje entre el maldito Pablo y la medio loquita y buena Raluca, noes es devuelta la esperanza en medio de un mundo caótico, en donde es posible que el Bien triunfe sobre el mal.

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