Se abrían las puertas para que los ángeles guardianes bajarán a este plano de consciencia y nos empezaran a cuidar. 

En palabras más simples, y para compartirles un poco de este conocimiento, aquí va: Sagitario, es un signo relacionado con la fe, con la oportunidad, con la expansión. Es el arquero que coge nuestra atención y la dirige hacia algún lugar. Cuando entra la época sagitariana, ya el drama ha pasado, tenemos tanta fe en la vida que por lo regular nos endeudamos, celebramos, o tomamos decisiones que simplemente pensaremos después. 

Sagitario está relacionada con la fe, y en el tarot es atribución astrológica del arcano XIIII (no es que esté mal escrito, es que así se escribe 14 en el tarot): La Templanza, el primer ángel visible dentro de este camino de autoconocimiento.

La templanza nos enseña que debemos encontrar un punto medio, y que necesitamos integrar los diferentes polos de nuestra psique para seguir en el camino evolutivo. Este arcano propone la paz entre nuestros procesos conscientes y nuestros procesos inconscientes. Plantea también una revisión juiciosa de nuestras aguas internas (nuestras emociones) para así podernos vincular de una manera más orgánica y más honesta con la vida. 

No es gratuito que todo lo social esté pasando de esta manera. Aparentemente lo vemos aberrante o incluso salvaje, sin embargo es una oportunidad para que como seres humanos integremos no solo nuestra rabia, nuestra inconformidad, nuestra frustración, sino también nuestra responsabilidad. Es en este momento donde tenemos la oportunidad de preguntarnos: ¿cuáles son esas acciones que me conectan con mi mejor versión?, ¿cuáles son esas acciones que me hacen responsable del mundo en el que vivo?, ¿Cuál es mi verdad, mi vocación?… e incluso, me pregunto de frente si de verdad ¿soy feliz?

Si bien los movimientos lunares son cíclicos, están danzando siempre entre la oscuridad y la luz, la luna nueva es ese momento donde todo está listo para que la intención (la semilla) este sembrada. Es por eso que durante estos días, incluso hoy, el día que que se publican estas palabras, tengamos la oportunidad de sembrar de corazón nuestra mejor versión. 

Podemos hacer de cuenta que existe ese ángel ahí en un lado del hombro que te está susurrando lo que debes hacer: quizás no sea lo más divertido, lo que más te guste, más sin embargo, es lo que necesitas hacer. Ya no hay marcha atrás, cuando el corazón sabe lo que necesita, es capaz de entregarse con plena confianza y fe que todo va a resolverse. 

Con esta luna podemos planear en tener una mejor manera con el cielo, con los ángeles o con Dios (como queramos llamarlo). A mi me gusta usar la palabra Dios, porque fue con la que crecí, más sin embargo también entiendo que hemos desmoronado muchas ideas y que nos hemos peleado con la religión. En esta ocasión, más allá de una iglesia, de una religión, tenemos un espacio muy lindo para conectarnos con las historias del cielo. 

Si de verdad nos permitimos abrir el corazón, empezaremos a ver que cada suceso tiene su razón de ser y que de él aprendemos. Así que sin duda, es un mes para no tener miedo, sino por el contrario, una fe absoluta de los caminos que se abren para cada uno de nosotros. 

Algo que recomiendo en este tiempo más allá de la conexión con nuestro ‘Yo superior’ es que hagamos una lista de intenciones de lo que queremos para el próximo año, y al frente de cada intención una acción que acompañe esa intención de manera más concreta; por ejemplo: Intención: “Quiero aprender a tocar guitarra”, acción:  Comprar una guitarra, o intención: “Quiero aprender un idioma”, acción: “Meterme todos los días a Duolingo”, y así sucesivamente. 

Como Sagitario tiene que ver en la astrología con temas de estudios profesionales, el extranjero, la filosofía, la maestría, los símbolos, las intenciones pueden estar muy orientadas hacia este tipo de temas. Lo importante es mantener la consciencia testigo en estos días y darnos cuenta que somos los únicos responsables de nuestras acciones e intenciones. 

Por último, antes de despedirme, quiero decirles que en este tiempo , además de la luna en sagitario, tenemos una posibilidad de materialización grande. Es importante que enfoquemos nuestra energía, que sepamos qué queremos, y que trabajemos de manera constante sobre ella.  Así que durante estos días hasta nuestra próxima celebración lunar, enfóquense en integrar esas dos voces que tienen en su cabeza, o esa dualidad, para poder encontrar el centro que nos llenara de poder, alegría y éxito.

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