Más allá del silencio es más que un pódcast. Es una ventana a las conversaciones que importan. Conducido por Rafael Poveda, este espacio se dedica a explorar los temas más polémicos y controvertidos de nuestra época. Cada episodio es una inmersión profunda, con un enfoque investigativo y crítico, en los casos que resuenan en nuestra sociedad. Únete...
El nombre de Juan Carlos Villa Cardona quedó grabado en la memoria del Eje Cafetero como sinónimo de miedo. Conocido como “el terror de Risaralda”, este hombre confesó haber asesinado a 11 personas, entre ellas 10 adultos mayores y un adolescente de 15 años. Su historia criminal es tan perturbadora como retorcida, marcada por un modus operandi que parecía sacado de una pesadilla: fingía ser sordomudo para ganarse la confianza de sus víctimas y luego atacarlas sin piedad.
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Durante años, Villa Cardona utilizó la vulnerabilidad de sus víctimas como escudo. Su fachada de hombre indefenso y callado le abría las puertas de hogares humildes, donde encontraba a personas confiadas y solas. Una vez dentro, desataba su brutalidad, dejando tras de sí un rastro de dolor y muerte que estremeció a todo el Eje Cafetero.
Los relatos de sus crímenes generaron horror en la opinión pública, no solo por la frialdad de sus acciones, sino también por la selección de sus víctimas: ancianos indefensos y un joven en plena adolescencia. Personas que jamás imaginaron que aquel hombre aparentemente inofensivo ocultaba una mente calculadora y sanguinaria.








Sin embargo, lo que parecía una historia de crímenes perfectos tuvo un giro inesperado. Villa Cardona fue capturado gracias a sus propios hermanos, quienes decidieron entregarlo a las autoridades. Lo que resulta aún más inquietante es que estos también participaron en algunos de sus delitos, convirtiendo la tragedia en un caso familiar de complicidad y horror.
Hoy, el “terror de Risaralda” paga una condena de 43 años en la cárcel de La Dorada, en Caldas. Tras su captura, quedó en evidencia cómo el disfraz de sordomudo fue su mayor arma, un engaño perverso que le permitió acercarse a sus víctimas con facilidad y ejecutar sus actos sin despertar sospechas inmediatas.
El caso de Villa Cardona abrió un debate en la región sobre la confianza ciega hacia desconocidos y la manera en que los criminales aprovechan la ingenuidad o la vulnerabilidad de las personas para cometer atrocidades. Más allá de los números fríos de víctimas, su historia representa la crueldad extrema que puede albergar un ser humano.
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Hoy, pese a estar tras las rejas, su nombre sigue causando escalofríos en Risaralda y en todo el Eje Cafetero. Su engaño, su violencia y la manera en que traicionó la confianza de los más indefensos lo convirtieron en uno de los criminales más temidos de Colombia.
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Homicidios reportados en Colombia
El siguiente mapa, desarrollado por Esri Colombia, muestra información de homicidios reportados en Colombia por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
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