Se extendió explicando el proceso de paz con las Farc, alcanzado en 2016, y el actual con el Eln cuando habló de lo positivo de su gestión de ocho años en todos los ámbitos y se mostró convencido de que con la paz el futuro y el desarrollo de su país “será más fácil” y dijo que entregará “un país mejor” que el que recibió.

Enumeró los avances en el acceso a la educación, la universalización de la sanidad, la mejora de las infraestructuras y el crecimiento de la clase media, con la reducción de la pobreza.

“Hace ocho años nadie se imaginaba que fuera posible culminarlo (el proceso) con éxito. Cuando lo decía la gente me miraba con escepticismo, pero lo logramos porque generamos las condiciones”, dijo Santos, quien admitió la existencia de detractores, en especial cuando se trata de “trazar la línea entre justicia y paz”.

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Hizo hincapié en que la Corte Constitucional respaldó los acuerdos y los calificó de “irreversibles”, de modo que el que asuma el poder en los próximos meses tendrá que mantenerlos.

Santos reconoció que en los últimos años ha crecido el cultivo de coca y asumió la responsabilidad de un hecho que atribuye a que en las negociaciones con las Farc impuso la sustitución de muchos cultivos, lo que llevó a campesinos a plantar coca para luego beneficiarse de ayudas para erradicarla.

Del proceso de paz, dijo que ha puesto en el centro a las víctimas del conflicto. “Ya hemos reparado a 800.000 víctimas, pero son ocho millones”, aseguró Santos, quien recordó que ya se ha empezado a devolver tierras a campesinos.

La construcción de la paz puede demorarse “una o dos generaciones” y será un proceso “largo y difícil, pero hay que hacerlo para que sea paz estable y duradera”.

Santos fue presentado por el expresidente del Gobierno español Felipe González, quien elogió la gestión del dirigente colombiano y le dio las gracias “por abrir la esperanza y hacer posible” la paz.

González, quien conoció a Santos en 1992, dijo que construir la paz es más difícil que hacer la guerra y destacó que el mandatario ha tenido el acierto de poner como prioridad a las víctimas de un conflicto de décadas a la hora de abordar la reconstrucción del país.

Tras entrevistarse ayer domingo con el jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, Santos cerrará hoy su agenda en Madrid con un encuentro con los reyes Felipe VI y Letizia y después regresará a Colombia.

Eln

Luego que la guerrilla anunciara el cese al fuego unilateral por cinco días para las elecciones presidenciales, Santos dijo que con ellos se está “negociando un cese el fuego, ojalá permanente y cómo avanzar en la agenda ya acordada”.

El presidente dijo que aspira a avanzar “lo máximo posible” con esa guerrilla, pero advirtió de que es necesario “que estén dispuestos”.

En este contexto, Santos aseguró que desea un acuerdo marco con esa guerrilla y que el próximo Gobierno colombiano decidirá cómo seguir.

Duque y Uribe

Uno de los aspirantes a sucederle es el candidato conservador Iván Duque, por cuya política económica fue preguntado Santos.

“Colombia tiene una larga tradición de un manejo responsable de la economía, con instituciones que funcionan… No hay mucho margen para cambiar la política fiscal, que está en la Constitución. Eso da confianza a los inversores”, aseguró el presidente.

De las amenazas de muerte a su antecesor, Álvaro Uribe, Santos señaló que, gracias a informaciones de los servicios de inteligencia, fue él mismo quien se las trasladó y lamentó que se hayan conocido, porque eso dificulta que se puedan investigar, pero añadió que el expresidente “está más protegido que nunca”.