Así lo confirmó una fuente de la Policía, que además mencionó que después del millonario hurto las autoridades comenzaron a hacer operativos, seguimientos y actividades de inteligencia para recuperar los celulares.
Lo anterior porque algunos de los teléfonos tienen un costo en el mercado superior a los 2 millones de pesos (cada uno) y la mayoría ascienden el millón de pesos, añadió la fuente.
Durante las investigaciones se han recolectado los videos de varias cámaras de seguridad del sector, pero hasta el momento no han logrado identificar a los sujetos que violentaron la seguridad de la bodega.
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Se presume que los teléfonos fueron hurtados para ser comercializados en locales ilegales del centro de la capital.
Entre tanto, las autoridades continúan en la ofensiva contra este hecho de inseguridad en la ciudad, pues cifras del Distrito demuestran que las denuncias por robo de celulares son las más reportadas.
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