Luego de más de 100 días del inicio de las sesiones presenciales del Congreso de la República, Piedad Córdoba asumió sus funciones. Este martes la senadora se presentó en la comisión séptima para hacer parte de la discusión de importantes proyectos, como la reforma política, la cual no apoyará.

La congresista del Pacto Histórico estuvo hospitalizada e incapacitada durante varios meses por una afección renal que, entre otras cosas, no le permitió tomar posesión de su curul presencialmente, el pasado 20 de julio.

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Foto de Piedad Córdoba en su regreso al Congreso

Finalizada su incapacidad, la congresista hizo presencia en el Senado. Este martes se presentó en el legislativo; dio un parte de tranquilidad sobre su estado de salud, dijo estar dispuesta a sacar adelante las iniciativas que están en trámite y las que preparó desde la distancia.

“Me siento muy complacida de estar en esta comisión. Ya son muchas las veces que he participado en ella y los temas son bastante importantes. Hice un seguimiento permanente de todo lo que se trabajó, o sea que estoy muy al orden del día”, expresó Córdoba en su regreso al legislativo.

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Con respecto a la reforma política, proyecto que no apoyará en su regreso al Congreso, Córdoba declaró que no comparte ese proyecto porque “es una puerta giratoria para que algunos salgan del Congreso y se vuelvan ministros, y después de ministros vuelven al Congreso”.

Según explicó, la reforma tiene una particularidad que le parece preocupa, y es el hecho de “generar un mismo grupo, una misma rosca, o sea que obstruye la posibilidad de nuevos liderazgos”.

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