Los hechos ocurrieron el pasado domingo a las 8:00 de la mañana, cuando los tres amigos departían en el parque del sector F Quirigua.
Según la información preliminar, un hombre en estado de embriaguez discutió con unas personas y luego se retiró del sitio. A los pocos minutos regresó y lanzó el artefacto explosivo contra Córdoba Jiménez y sus compañeros, señala la investigación.
Córdoba Jiménez fue quien sufrió las heridas más graves. Aunque fue trasladado rápidamente al hospital de Engativá, ingresó en muy mal estado de salud, por lo que ese domingo en la tarde fue remitido de urgencias a la Partenón.
En ese centro asistencial, los médicos indicaron que el fabricador de joyas del centro de la capital tenía que ser sometido a una cirugía de tórax. Sin embargo, una esquirla incrustada en su cerebro impidió el procedimiento, refiere informe investigativo conocido por Pulzo.
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Córdoba Jiménez comenzó a desmejorar, le diagnosticaron muerte cerebral y en la noche del miércoles falleció.
“Cuando entré a la clínica me dijeron que tenía unas lesiones en los pulmones, pero nunca nos mencionaron que tenía un problema en su cabeza. Para mí fue un consuelo haberlo visto, tocado y decir ‘se va a salvar mi hermano’. Tenía la fe de que se iba a salvar, nunca me aparté de él. Saber que tenía muerte encefálica fue para nosotros algo muy duro, él era mi mano derecha”, lamentó Ernesto Córdoba, hermano mayor de la víctima, en una entrevista con El Espectador.
Ernesto, según el diario capitalino, el día de los hechos estuvo con su hermano y sus amigos en el parque, pero se fue antes del atentado. Así lo citó el medio:
“Estábamos departiendo entre amigos, yo me fui unos minutos antes. Según tengo entendido, hubo un inconveniente entre dos personas, una de ellas se fue y después volvió y lanzó la granada. Allí estaba mi hermano y dos amigos más”.
Aunque en un principio las autoridades y los medios informaron que la investigación y las hipótesis apuntaban a una riña por presuntos problemas de microtráfico, la familia Córdoba Jiménez desmintió esa versión en el diario. Incluso afirmó que se habría tratado de un ataque por intolerancia.
Entre tanto, las otras dos personas que resultaron heridas por la explosión permanecen internadas en los hospitales Simón Bolívar y Engativá, bajo pronóstico reservado.
Estas son algunas fotografías con las que amigos y familiares de Rubén Darío lo recuerdan.
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