Jorge Enrique Pizano buscó a la columnista de Semana para confiarle –así como lo hizo con un reducido grupo de periodistas– los elementos que probarían los alcances del poder corruptor de la constructora brasilera en Colombia.

Solo que los correos electrónicos y en particular los mensajes de WhatsApp que fueron publicados por la revista revelan la presión a la que estuvo sometido, en sus últimos meses de vida, el único testigo y denunciante de Odebrecht.

No pudo soportar la presión a que lo sometieron”, aseguró Duzán en una extensa publicación en la que plasmó los temores que Pizano guardaba respecto a su seguridad y la desconfianza que tenía sobre el fiscal Néstor Humberto Martínez.

Sé que están intentando hacerme un montaje para amañar testimonios en la Fiscalía y acusarme de que yo recibí un soborno de Odebrecht cuando yo era gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado”, manifestó un atribulado Pizano a Duzán en uno de los mensajes compartidos por la periodista en Semana.

A mí me van a hacer lo mismo que a Luis Fernando Andrade y no me voy a dejar”, aseguró el exauditor de la Ruta del Sol 2 en uno de esos mensajes que revelan cuál era su estado anímico y sus principales temores, añadió Duzán.

De hecho, desde que buscó ayuda en la Embajada de Estados Unidos para que la justicia de ese país lo acogiera como testigo protegido, en el marco de una investigación federal en contra de la cúpula de Odebrecht, la sensación de que era seguido y que sus comunicaciones fueron interceptadas se acrecentó con los días, explicó la periodista.

“Estoy convencido de que me están haciendo seguimientos. Esta mañana la fiscal 80 me comentó que la tienen ‘presionada’ y me pidió que solicitara protección por escrito, cosa que hice ayer mismo”, indicó Pizano en una de las conversaciones divulgadas por Semana.

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“Sentía que lo acechaban”, anotó Duzán justo antes de entrecomillar unas líneas que serían las últimas que cruzó con Jorge Enrique Pizano, que falleció de un infarto el 9 de noviembre pasado:

“Estoy enfermo, sin trabajo… me hizo mucho daño el procurador Carrillo con sus declaraciones que hoy siguen teniendo su efecto cuando le dijo al país que yo era un empleado de Odebrecht en 2015 y que desde entonces no ha querido rectificar… Pero además, me dijo mi abogado que me van a llamar a interrogatorio por el túnel Tunjuelo-Canoas”.