Ni siquiera la Iglesia se salva de la crisis de inseguridad que por estos días viven varias ciudades del país, por cuenta de los amigos de lo ajeno y las amenazas que varios grupos criminales ejercen en contra de la Policía Nacional.

Ahora, un templo en Cartagena fue objeto de un hurto que se registró en la madruga de este martes. De acuerdo con William Alberto Narvaéz, párroco de la iglesia, los ladrones se llevaron varios objetos de valor y cometieron actos irrespetuosos en contra de la comunidad religiosa, según contó en Blu Radio. 

“Con profunda tristeza como párroco de la iglesia San Roque, y unido al sentir de todos los moradores del tradicional barrio Getsemaní y a todos los católicos cartageneros, rechazo este acto de delincuencia que, además, de hurtar y causar daño en bien ajeno, profanó las especies eucarísticas y golpeó la fe de todos los católicos”, aseguró el sacerdote en la emisora. 

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El religioso, visiblemente afectado, contó también que gracias a la solidaridad de los feligreses ya adelanta algunas labores de reparación con la escuela taller que tiene en la iglesia y que la componen algunos creyentes: “Agradezco a la Escuela Taller Cartagena de Indias quienes inmediatamente reaccionaron y en este momento están reparando el daño en la puerta principal del templo de San Roque”. 

Por otra parte, Marcos Vargas, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Getsemaní, alertó sobre la grave situación de inseguridad que se vive en el sector de la ciudad amurallada y pidió medidas de intervención por cuenta de la Alcaldía de Cartagena. 

De hecho, en días pasados, habitantes de Getsemaní hicieron un planton para exigir que las autoridades intervengan en el barrio, pues aseguran que faltan medidas de regulación en el espacio público, lo que ayuda a que incrementen las cifras de inseguridad en el sector.