Esa transformación, según dijo Juan Manuel Santos al periodista Juan Roberto Vargas, empezó en su primer mandato tras conocerse los miles de casos de civiles que fueron ejecutados por militares para ser presentados como guerrilleros muertos en combate.

“A mí me dolió muchísimo descubrir eso (los falsos positivos) y por eso los acabamos de ipso facto. Eso fue un esfuerzo para cambiar la doctrina, comenzamos a exigir desmovilizaciones, luego capturas y en última instancia, muertos”, manifestó el Presidente a Noticias Caracol.

“Eso además era muy conveniente porque un desmovilizado desmoraliza al enemigo, trae información y es más útil dentro de la guerra. Eso se logró y afortunadamente los ‘falsos positivos’ se acabaron por completo. Y hoy los responsables están acudiendo a la justicia para ser juzgados y sancionados”, añadió el mandatario en la entrevista que concedió a ese medio.

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Entre 2002 y 2008 en Colombia se habrían registrado más de 3.000 ejecuciones extrajudiciales cometidas por militares de 180 batallones del Ejército, de acuerdo con informe de Human Rights Watch que fue publicado por El Tiempo en junio de 2015.

Ese reportaje también menciona que la cúpula militar del entonces presidente Álvaro Uribe terminó enredada con estos hechos, que son investigados por la Fiscalía y que conocerá la Justicia Especial de Paz (JEP).

Juan Manuel Santos fue ministro de Defensa en el primer gobierno de Uribe entre 2006 y 2009.