En el encuentro estuvieron Iván Duque, el defensor del Pueblo, Carlos Negret, y varios de los ministros designados por el nuevo gobierno.

La reunión “es para que empecemos un trabajo conjunto con la Defensoría, la Fiscalía y la Procuraduría para que podamos responder a las alertas tempranas y tengamos una política pública eficaz de protección a los derechos humanos y a los líderes sociales. Nos duelen las muertes de nuestros compatriotas y los crímenes y amenazas que se han cometido contra los líderes”, explicó el presidente electo.

El plan de Duque, básicamente, está diseñado sobre dos pilares: “Responder a las alertas tempranas” y que se implemente una “política pública” de protección a los líderes sociales y campesinos que ven en riesgo su vida por la labor que ejercen.

Por su parte, Carlos Alfonso Negret calificó como “histórica” la visita de Duque, “porque es la primera vez que viene un presidente a la Defensoría del Pueblo a tratar y escuchar (…) qué está pasando con los derechos humanos y con los líderes sociales”.

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“Vamos a trabajar conjuntamente para evitar el asesinato de los líderes sociales, para trabajar por las comunidades indígenas y campesinas, y para que no se produzca ni una violación más a los derechos humanos en Colombia”, explicó Negret, declaración que está en un comunicado de la entidad.

La Defensoría del Pueblo aseguró en un informe reciente que entre el primero de enero de 2016 y el 30 de junio de 2018, 311 líderes sociales han sido asesinados en el país.

Esta es la declaración completa que entregó Duque a medios.