El nuevo fraude tiene que ver con el caso de Jesús Hernán Lasso Villota, exintegrante del Grupo de Automotores de la Sijin del valle del Cauca, capturado desde febrero de 2017 y procesado por el llamado ‘cartel de la chatarrización’.

Según cuenta la Fiscalía, dos meses después de la captura de Lasso, el abogado Paulo Muñoz tramitó ante un juez de control de garantías de Bogotá una sustitución de la medida de aseguramiento en el establecimiento carcelario por una detención domiciliaria, alegando como prueba un dictamen médico legal falso que ‘demostraba’ el delicado estado de salud del retenido.

La maniobra, en efecto, funcionó y Lasso cumplía su condena en su residencia. Pero todo se vino abajo tras el arresto del abogado Muñoz por el caso de la liberación de Pedro Aguilar con un falso juez, circunstancia que hizo revisar todo su accionar por parte de la Fiscalía.

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“Los investigadores evidenciaron varias inconsistencias en el dictamen presentado en abril de 2017, con el que el exintegrante de la Sijin, Jesús Hernán Lasso Villota, recibió detención domiciliaria; por ejemplo, tenía un número serial que no corresponde a los utilizados por el Instituto Nacional de Medicina Legal lo que demostraría la falsedad”, reveló el ente acusador.

Lasso Villota volvió a ser trasladado a la cárcel. A diferencia de Pedro Aguilar, no se fugó, y efectivamente estaba en su casa “pagando condena”.