Las 15 mascotas dormían con la señora en la misma habitación, y tras el deceso de ella dejaron de consumir alimentos y la depresión se apoderó de ellos, reportó Caracol Radio.

Por esa razón, los hijos de la mujer decidieron aplicarles la eutanasia a los 15 perros, pues estaban muriéndose de hambre.

Alejandro Sotomonte, médico veterinario que conoció el caso, le dijo a la emisora: “Una pareja de adultos mayores que gozaban de la compañía de 15 caninos, pero hace seis meses falleció la señora. Allí quedaron las 15 mascotas muy enfermas, muy entristecidas por la ausencia de uno de sus amos y con la calidad de vida prácticamente desmejorada”.

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“Hay que recalcar que los caninos siempre estuvieron con la señora. Dormían en su cama, alrededor de su habitación, en el piso. Siempre la acompañaron. Al fallecer la señora, ellos continuaron en el cuarto, pero se fueron deteriorando por la tristeza, la depresión, poco comían”, agregó el veterinario en la frecuencia radial.

Para él, “realmente, estos son casos especiales en los que los animales también se van, poco a poco, con los amos que fallecen”.

La emisora estableció que por la aplicación de la eutanasia a los 15 perros la familia pagó 15 millones de pesos, y que fueron sepultados en una finca de Rionegro (Santander), cerca de donde reposan los restos de su ama.