Fiscales pertenecientes al Grupo Especial para la Lucha Contra el Maltrato Animal (Gelma), lograron la judicialización de dos hombres, que en diferentes hechos, cometieron graves crímenes contra animales en Tolima y Boyacá.

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Uno de los casos más escabrosos se dio en el departamento, donde se señaló a Gentil Aldana, por su posible responsabilidad en el envenenamiento de 10 perros en una vivienda de Ibagué, en julio del año anterior.

De acuerdo con la Fiscalía, esta persona habría suministrado una sustancia tóxica a los animales, una vez su cuidador habría salido de su casa, en la que vivía en arriendo, para trabajar en actividades de reciclaje.

Una vez el hombre arribó a su hogar, se encontró con la muerte de nueve de sus perros y un cachorro aún con vida, el cual fue trasladado de manera inmediata a un centro veterinario, pero debido a la gravedad de su estado, no sobrevivió.

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La investigación estableció entonces que, al parecer Aldana, dueño del inmueble, amenazó previamente con envenenar a los animales, ya que el dueño de estos, le debía varios meses de arriendo.

Asimismo, se conoció que también intimidó a algunos testigos de lo sucedido para que no impusieran denuncia alguna.

Agresión con arma blanca en Boyacá

El otro hecho de maltrato animal registrado por la Fiscalía, tuvo lugar el pasado 28 de enero en zona rural de Caldas, Boyacá. El Gelma determinó el presunto ataque de Gilbert Bravo, a Toreto, un perro pastor alemán.

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De acuerdo con la investigación de Fiscalía, el canino sufrió un ataque con arma blanca a manos de Bravo, en el que se le causó una grave herida a una de las extremidades de Toretto. El perro fue intervenido quirúrgicamente, pero murió en el postoperatorio.

Por esta acción, Bravo fue imputado por el delito de maltrato animal.

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