“Se abstuvieron de dar pronto trámite y verificación a la información recibida acerca de la inminencia de un atentado terrorista de gran magnitud en el norte de la capital de la República, a pesar de que fueron señaladas las instalaciones del club como posible blanco de esas intenciones”, dicta el fallo citado por El Espectador.

Según el alto tribunal, las autoridades no tomaron las medidas de seguridad suficientes para garantizar el bienestar de los ciudadanos, sabiendo que en esa época que vivía una complicada situación de conflicto por los constantes atentados de la antigua guerrilla de las Farc, informó Blu Radio.

El hecho terrorista contra club El Nogal se perpetró con un carro bomba en la noche del 7 de febrero del 2003 y dejó 37 muertos y 198 heridos.

El atentado fue reconocido por líderes del grupo guerrillero ante los familiares de las víctimas, a quienes les pidieron perdón, y frente a la opinión pública.

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Además, la condena a la Nación, asegura el diario capitalino, incluye al Ministerio de Defensa, Ministerio de Justicia, la Fiscalía y a “los que representen el DAS”, pues estas autoridades, según la magistrada ponente, estaban en la obligación de mantener a la población civil alejada del conflicto.

La decisión obedece a una denuncia interpuesta por los familiares de Catalina Muñoz Toffoli y Cesar Augusto Caicedo, que murieron en el atentado.

De acuerdo con Noticias Caracol, el tribunal falló a favor de las víctimas y “ordenó la instalación de una obra de arte en las inmediaciones de la zona afectada con el atentado”.