Los indígenas ocuparon una vasta parte de la hacienda que pertenece a la familia Eder Garcés, la misma que es propietaria del ingenio azucarero Manuelita, indicó Blu Radio.

Al parecer, los indígenas reclaman esas tierras que, según ellos, les pertenecían y les fueron quitadas en el siglo XVI, apuntó ese medio.

Ese terreno en particular fue usado por sacerdotes jesuitas para sembrar la caña de azúcar que luego se volvió en el negocio multimillonario que a día de hoy da miles de trabajos en Cauca y Valle del Cauca, añadió esa emisora.

(Vea también39 niños Wayú han muerto por causas asociadas a desnutrición; 13 estaban a cargo del ICBF).

“Hay aproximadamente unos 100 indígenas. No han agredido a los trabajadores ni han hecho daño en los cultivos, pero la sola presencia de ellos intimida. Cuando llegan así es a apropiarse y a hacer afectaciones”, dijo a esa cadena radial uno de los trabajadores del ingenio ubicado en la zona.

Lee También

Esta invasión se da en medio de tensiones en el norte de Cauca por conflictos entre trabajadores de ingenios azucareros e indígenas que han llegado a ocupar.

Indígenas se habían tomado otro ingenio en Cauca

El pasado 24 de julio, se conoció un video en el que se ve cómo decenas de indígenas queman palos de madera dentro de un ingenio azucarero en Padilla, Cauca.

La gravedad de los hechos llevó a que el presidente electo Gustavo Petro se pronunciara y pidiera un diálogo entre ambos sectores.

“Toda solución al conflicto por las tierras debe pasar antes que nada por el diálogo. Invito al movimiento indígena, a Asocaña y a los movimientos sociales del norte del Cauca a iniciar el primer dialogo regional de Colombia por la Paz”, escribió Petro en su cuenta de Twitter.