
En el barrio la Candelaria La Nueva, en la localidad de Ciudad Bolívar, sur de Bogotá, los vecinos están cansados por una casa en plena zona residencial en la que habría delincuencia sexual y consumo de estupefacientes.
(Ver también: Horrorosa situación se vive en Bogotá: Kennedy, Los Mártires y Suba, donde más se padece)
Se trata de una vivienda de tres pisos con puertas doradas, en la cual en el primer piso hay un bar, pero en los otros dos habría habitaciones en las que llegan hombres de toda la ciudad a buscar mujeres para acostarse con ellas.
De hecho, a primera vista no se ve nada sospechoso ni fuera de la legalidad, pero la fuerte música todos los días y el alto tránsito de personas en ese lugar pusieron a sospechar a los vecinos, quienes les piden a las autoridades que actúen para evitar que se presenten cosas fuera de lo común en un sitio tranquilo como ese.
“Una vez golpearon en mi casa preguntando si ahí era el prostíbulo”, dijo uno de los vecinos de esa zona en diálogo con el diario El Tiempo, pues al parecer los problemas, el ruido y más han causado estragos en ese sector.
Teniendo esto en cuenta, las autoridades ya comenzaron con operativos para tratar de coger a los encargados de este lugar en flagrancia, pero hasta ahora no se ha podido hacer nada concreto.
De hecho, en julio de este año ya se adelantó un operativo en el que se puso un comparendo y se logró el cierre del lugar por seis días, pero cuando pasó el tiempo volvió a trabajar sin ningún tipo de inconveniente, comentó el medio mencionado.




Luego, al seguir las quejas por parte de los vecinos, se adelantó un segundo procedimiento, pero esta vez de forma encubierta, ya que el lugar tenía a hombres ubicados en zonas específicas que alertaban a los dueños del sitio en caso de que llegara la Policía.
Con este segundo trabajo, las autoridades lograron sellarlo de nuevo porque en esta ocasión sí encontraron dosis de sustancias psicoactivas, tales como cocaína y bazuco, las cuales les eran ofrecidas a los clientes del lugar.
“A través de redes sociales se promocionan este tipo de actividades y se engaña a las personas haciéndolas creer que irán a lugares legalmente constituidos. Lo que hemos evidenciando es que se usan casas de dos y tres pisos con bares que funcionan de forma clandestina y con habitaciones en los demás pisos sin ningún tipo de regulación ni verificación de autoridad sanitaria”, aseguró el comandante de la Estación de Policía de Ciudad Bolívar, el coronel Germán Gómez, en palabras recogidas por El Tiempo.
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