Esa cuenta mostró imágenes de un contrato en el que se establecía que el precio por unidad de tapabocas lavables de tela era de $ 146.217 por unidad.

Además, aseguraba que en total se habían gastado $ 24’687.032, pues se habían adquirido 170 unidades.

El escándalo que se suscitó fue tal que la mandataria y el Distrito tuvieron que salir a aclarar un vacío que no aparece debidamente detallado en el contrato publicado en la web Colombia Compra.

La Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP) explicó que no se trataba de 170 tapabocas individuales, sino que esas unidades se referían a cajas que contenían 100 de ellos, cada una.

“En total 17.000 tapabocas con un costo aproximado de $ 1.450 por unidad, y no $ 145.000 como se ha señalado”, añadió.

La UAESP también publicó el documento original completo de la contratación, disipando definitivamente las dudas, aunque la cuenta que publicó las denuncias mantiene el trino con su denuncia.