Ya enguayabado al día siguiente, el hombre acudió al médico con un fuerte dolor de pecho, y fue en ese momento en que los doctores (y él, también) se llevaron la gran sorpresa: en su esófago estaba la llave que se había tragado la noche anterior, como lo revelaron las radiografías y una endoscopia, informa el Daily Mail.
El paciente dijo no haber sentido nada hasta la mañana siguiente porque estaba “gravemente intoxicado” por la ingesta de alcohol, reveló el mismo medio.
Inmediatamente después de que le detectaron el objeto extraño en la base del esófago, atorado antes de ingresar al estómago, los médicos le administraron anestesia general al hombre y procedieron a operarlo.
La cirugía fue exitosa y el travieso y ‘olvidadizo’ hombre se recupera satisfactoriamente, informa la clínica. Este es el video médico:
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