“Por orden del presidente, el ejército estadounidense ha tomado medidas defensivas decisivas para proteger al personal estadounidense en el extranjero al matar a Qasem Soleimani”, dijo en un comunicado, y posteriormente agregó que su intención era “disuadir” futuros planes de Irán.

Las Fuerzas de Movilización Popular (Hashd al Shaabi), una coalición de paramilitares mayoritariamente proiraníes y ahora integrados en el Estado iraquí, afirmaron que su número dos Abu Mehdi al Muhandis y el general iraní Qasem Soleimani, jefe de la Fuerza Quds, han muerto “en un bombardeo estadounidense”.

Luego de ese anuncio, Washington no había hecho comentarios sobre el bombardeo contra un convoy de Hashd al Shaabi cerca del aeropuerto de Bagdad, pero ya el Pentágono —sede del Departamento de Defensa— admitió la información.

Bombardeo en Bagdad

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Paramilitares iraníes confirmaron la muerte de Soleimani en el bombardeo, enviado de Teherán para los asuntos iraquíes, y lo atribuyeron a Estados Unidos en una declaración leída en la televisión pública iraní:

“Los Guardianes de la Revolución anuncian que el glorioso comandante del islam, Haj Qasem Soleimani, después de una vida de servidumbre, murió en mártir en un ataque de Estados Unidos contra el aeropuerto de Bagdad esta mañana”.

El ataque hace temer una nueva espiral de tensión entre Irán y Estados Unidos en Irak, donde el martes unos manifestantes proiraníes atacaron la embajada estadounidense.

Trump y Kim

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Como consecuencia de la muerte, el petróleo subió más de 3 % y minutos antes del comunicado del Pentágono, Trump le apuntó a trinar una bandera de su país, como símbolo de victoria: