Con ese escenario, Frediany Gómez, colombiano residente en Ucrania, le contó a Noticias Caracol que, si bien en Ucrania hay preocupación, no hay un pánico generalizado, como parece verse en el resto del mundo.

Gómez, que está en ese país desde septiembre de 2021, sostiene que hay gente preocupada porque la situación no pase a mayores, pero la vida diaria sigue.

“Estamos bien, estamos tranquilos. Nosotros seguimos yendo al cine, seguimos yendo al centro comercial”, destacó el colombiano.

Gómez, que vive en la ciudad de Járkov con su esposa ucraniana, es guía turístico y dice que la tranquilidad en las calles es opuesta a las alarmas que se han encendido desde occidente.

De hecho, lo expone muy sereno: “Estoy a 35 kilómetros de Rusia. Yo estoy a 40 minutos de la frontera y aquí no está la tensión. No es que yo me levante y estén pasando los aviones encima ni los helicópteros ni los tanques”.

De hecho, dos colegas colombianos de Gómez que viven en Kiev, capital de Ucrania, también reportan calma. Le dicen que todo está tranquilo, que siguen llegando turistas y que continúan dando recorridos.

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En su relato a Noticias Caracol, Frediany Gómez dice que las versiones sobre la invasión rusa son pan de cada día desde hace años.

“La gente ya está cansada de que todos los meses esté la misma situación. El mismo tema, que a veces se agudiza […], pero aquí la gente ya ni le presta atención a ese tema”, concluye.

La serenidad de Gómez contrasta con el anuncio que hizo recientemente el presidente Iván Duque cuando abrió la posibilidad de que los colombianos residentes en Ucrania pidan ayuda para salir de ese país.

“Mi instrucción, muy clara, a la Cancillería es que se pueda contactar a todas las personas de las que se tiene registro de residencia en Ucrania”, dijo Duque, para que quienes quieran se alejen de la tensión en esa zona.