En un tuit, la compañía dijo que “unos 10 pasajeros” del vuelo EK203 “fueron atendidos a su llegada por las autoridades de salud locales como medida de precaución”, sin especificar de qué se vieron potencialmente afectados.

Los otros pasajeros, de los cuales Emirates no especificó el número, podrían desembarcar rápidamente en la terminal aérea, agregó la compañía en su mensaje.

La cadena de televisión local ABC, que hablaba de docenas de pasajeros enfermos, transmitió imágenes de una serie de vehículos de emergencia que se estacionaron en la pista cerca del avión.

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Varios medios de Nueva York informaron que los pasajeros habrían sido puestos en cuarentena. De hecho, la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey había presentado un panorama mucho más preocupante al decir que hasta 100 pasajeros de los 500 que iban en el avión habían afirmado sentirse enfermos.

Erin Sykes, una de las pasajeras que iba en el avión, le contó a CNN que “era obvio” que varias personas estaban enfermas antes del despegue. También aseguró que el vuelo fue tranquilo, por lo que no creía que las afecciones estuvieran relacionadas con las turbulencias. Luego agregó:

“La gente estuvo tosiendo todo el tiempo. Ahora algunas personas tienen fiebre. Nunca se les debería haber permitido abordar”.

Contactada la agencia de la Autoridad Portuaria que administra los aeropuertos de Nueva York no había confirmado la información de la cuarentena.