Provenientes de una familia de músicos, Mau y Ricky , hijos de Ricardo Montaner, continúan celebrando el éxito de Desgenerados Tour, su gira por Argentina, que da nombre a su próximo disco. Los hermanos de Evaluna causaron furor en varias ciudades del país austral, que los acogió durante muchos años y que ahora corea sus canciones.

En sus redes sociales, donde cuentan con más de siete millones de seguidores, han compartido los momentos más memorables de lo que ha sido su primera gira oficial como dúo. Después de 22 conciertos en el interior del país, la pareja de hermanos llegó a su segunda fecha en el Estadio Luna Park, uno de los escenarios más importantes de la capital argentina.

(Lea acá: [Video] Micro TDH une fuerzas con Mau y Ricky en su nuevo sencillo ‘La chama’)

 

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Olivia sorprendió a Mau y Ricky con el relato de su batalla contra el cáncer

En medio de su presentación, donde cantaron sus famosas canciones Desconocidos y Mi mala, Mauricio Alberto y Ricardo Andrés subieron al escenario a Olivia, una pequeña que los hizo llorar, pero a quien los hermanos Montaner lograron hacer sonreír.

Mau y Ricky subieron a las redes sociales el video de su encuentro. Allí se ve a la niña cuando les recuerda que, unos años atrás, ellos le enviaron un video con un mensaje de apoyo. “Gracias, su música me dio muchas fuerzas para seguir mi tratamiento, los amo”, dice un cartel que Olivia llevó al evento y que hizo llorar a los dos hermanos.

 

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Después de conocerse que, desde muy corta edad, Olivia batallaba contra el cáncer, todo el público empezó a corear su nombre al unísono. En el escenario, Ricky le dijo, ”Te quiero contar una cosa, ¿tú sabías que tienes superpoderes?” y después le explicó que con su mano, ella podía “hacer gritar” al público. “Cuando la subas la gente grita y cuando la bajas deja de gritar”. La niña lo intentó, y en efecto, el público siguió sus indicaciones.

La niña vivió otro momento especial cuando Mau le ‘enseñó’ otro truco de magia: le prestó una baqueta de batería, pero le hizo creer que el instrumento era en realidad, una ‘varita mágica’, que al apuntarse a las pantallas, lograba que todo se encendiera al instante. Cuando Olivia lo intentó, efectivamente, el escenario se llenó de luz.