Mientras subía a reclamar el premio, Rafa Sarmiento, el comentarista de los premios para TNT y HBO Max en español, recordó lo dura que ha sido la carrera de este actor, hoy con 54 años.

“Este regreso para Brendan Fraser me parece triunfal, dignísimo. Se alejó de las pantallas por problemas de dolores en la espalda, adicción a los analgésicos, el rechazo que pasó tras el abuso sexual que sufrió y para dedicarse a su hijo con autismo y no es poca cosa que cargar”, expresó.

(Lea también: Aplausos para Lady Gaga por ayudar a fotógrafo que se pegó totazo en los Premios Óscar)

De una presencia notoria a finales de los 90 en películas como La Momia y George de la selva pasó a hacer papeles más pequeños y uno o dos (en ocasiones ninguno) al año. A la revista GQ le dijo en una entrevista que su ausencia se debía, en gran parte, a temas físicos y a haber destruido su cuerpo: lesiones en un disco de la espina dorsal, costillas rotas, traumatismos en las rodillas, problemas en las cuerdas vocales y varias operaciones.

En 2021 participó en la película No Sudden Move y EL COLOMBIANO estuvo presente en una mesa redonda con un medio australiano y otro irlandes en la que se le preguntó por esa ausencia: “Cada año desde La Momia hice algo”, reiteró, especialmente por sus trabajos en televisión, pero sí especificó que el volver al cine con No Sudden Move, al lado de Benicio del Toro y Dan Cheadle era la mejor manera de resurgir en la pantalla grande, “más con una cinta de Steven Soderbergh, estoy feliz”, dijo en ese momento.

De ahí siguió el papel en La ballena —para el que usó una prótesis de 136 kilos— y que le dio varios premios en la temporada, incluyendo el Óscar a mejor actor.

Lee También

Fraser regresó por todo lo alto con este papel, el de un profesor de inglés con obesidad mórbida que trata de ganarse el favor de su hija en los días más agónicos de su vida.

Visiblemente emocionado y con la voz entrecortada, Fraser recogió este premio agradeciendo al director de la película, Darren Aronofsky, por haberle dado el papel de su vida y por embarcarle en este “barco con la ballena”, en alusión al título de la película.

Recordó que comenzó su carrera hace treinta años y en aquel momento en el que tuvo muchas facilidades no supo agradecerlas. “Hasta que paró“, lamentó.

“Gracias por este reconocimiento porque no podía haberlo hecho antes”, dijo Fraser.