En entrevista con La Red, la actriz contó que subió los 10 kilos para protagonizar ‘Valentino, el argentino’. A ella le resultó llamativa esta producción no solo porque sería la protagonista, sino también porque tendría que vivir un tiempo en Argentina.
En 2 meses y medio, Liliana se dedicó a “comer de todo”, a dormir mucho y a hacer pesas en el gimnasio “con mucho peso, muy pocas repeticiones y cero cardio”. La actriz indicó al programa que, de la mano de una nutricionista, mantuvo los 10 kilos de más durante los 10 meses que duró la grabación de la novela.
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Al terminar ese proyecto, Liliana trató de recuperar su figura con ejercicio y una buena alimentación, pero no pudo, por lo que decidió hacerse una liposucción. Según ella, esta la había acordado cuando firmó el contrato para protagonizar la novela y era su última opción.
La actriz indicó al programa que esa cirugía fue un tema “bastante complicado” para ella porque la recuperación fue dolorosa y tuvo que cuidarse “el triple” para evitar consecuencias negativas.
Al recordar ese episodio de su vida, Liliana manifestó que de alguna manera fue “irresponsable” y “demasiado apasionada” con su trabajo. Ahora confiesa que si le volvieran a ofrecer un papel que requiriera subir o bajar de peso, no lo volvería hacer:
“No volvería engordar por ningún personaje. No volvería a hacer nada que tenga que ver con el tema de la salud. Entre más pasa el tiempo, menos lo haría”.
Así luce Liliana ahora, luego de la pesadilla que vivió:
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