Poco más de un mes de discusión le tomó al Congreso aprobar la reforma tributaria propuesta por el Gobierno del presidente Gustavo Petro. Este jueves, la Cámara de Representantes aprobó la conciliación del documento, que ya había sido avalado el miércoles por el Senado, por lo que solo falta que sea sancionado por el mandatario para que se convierta en Ley.

Durante la celebración de los 103 años de la Fuerza Aérea Colombiana, el mandatario expresó su satisfacción por el trámite de la iniciativa, que si bien tuvo varios traspiés en el Congreso, le servirá para financiar su plan de Gobierno y varias de las promesas que hizo en campaña.

El presidente Petro reiteró que la reforma fiscal impondrá tributos inéditos a quienes más dinero tienen y aplaudió al Congreso por “demostrar que está al servicio de quienes más lo necesitan” y “que está al servicio del interés general y no del particular”.

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“Por primera vez, en muchas décadas, hablamos de ponerle impuestos a las capas más ricas de la población para financiar los gastos y las inversiones en la población más pobre del país”, mencionó el mandatario sobre la destinación de los $20 billones que pretende recaudar la reforma tributaria, en que se priorizará la “justicia integral” en el país.

De acuerdo con Petro, tanto los impuestos como el gasto social, que denominó “riqueza nacional”, es su apuesta para que Colombia empiece “un camino hacia la justicia” y deje atrás su pasado como “uno de los países más desiguales de la tierra”.

Aprobada la reforma tributaria, que para muchos era el proyecto más importante de estos primeros meses del Congreso, ahora viene el trámite de las reformas política y pensional. Sobre esta última, que sin embargo tendrá su discusión el próximo año, el mandatario dio algunas líneas que pretende con la iniciativa.

Según dijo, la reforma cuyo proceso de concertación inició este mes y finalizará en febrero, está planteada para dar resultados en tres años. En los dos primeros años, dijo, el objetivo es bajar la deuda para que a partir del tercero se implemente un sistema pensional de cobertura total para quienes cumplan con la edad de pensión.

El mandatario explicó que el objetivo es “liberar $18 billones del presupuesto anual que hoy se gastan subsidiando el pago de pensiones para tener más capacidad de reducir la deuda en los dos primeros años: $9 billones de ellos; y a partir del tercer año lograr un sistema que sea del 100% de cobertura”. Su visión es que de esta forma 3 millones de ancianos que no cuentan con pensión tengan, al menos, medio salario mínimo de pensión individual.