La curiosa escena se presentó cuando el pedalista de Países Bajos subió a la tarima de premiación, donde recibió la ‘maglia rosa’, que lo acredita como el mejor de la clasificación general, así como las camisetas de líder de la montaña y por puntos.

En ese instante le entregaron la tradicional botella de champaña para que festejara delante del público y de las cámaras que lo estaban enfocando, con la mala suerte que al destaparla por poco sufre un inesperado accidente.

El corredor agitó tanto el envase para quitarle el corcho que este salió disparado hacía su rostro, con la fortuna que lo logró esquivar.

Sin embargo, el chorro de licor sí fue directo a ojo derecho, lo que únicamente le causó una pequeña molestia que no le impidió celebrar el triunfo conseguido.

La jornada se desarrolló en Hungría sobre 195 kilómetros principalmente planos, ya que en los últimos 4 kilómetros el terreno era de leve ascenso, lo que favoreció a Van der Poel, que se impuso con autoridad.

Sin embargo, en el remate no todo fue color de rosa si se tiene en cuenta que el australiano Caleb Ewan, que luchaba por la victoria junto a Van der Poel, se enredó solo y se cayó metros antes de cruzar la meta.

Los favoritos arribaron 4 segundos después en el pelotón principal, en el que estaban los colombianos Santiago Buitrago, Iván Ramiro Sosa y Miguel Ángel ‘Supermán’ López.

Este sábado 6 de mayo, el pelotón continuará en suelo ‘magiar’, donde deberá afrontar una contrarreloj individual de 9,2 kilómetros en Budapest y con meta en alto de cuarta categoría.

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En video, la particular situación: