En una presentación decorosa, Deportes Tolima puso fin este sábado a su campaña como local en la temporada del 2022 y con triunfo frente a Millonarios (1-0), en juego válido por la jornada 19 de la Liga BetPlay 2, confirmó su recuperación en el último tramo del ‘todos contra todos’; por más de que verá las finales por la TV. Un triunfo con el que la esperanza de jugar la Copa Libertadores sigue latente.
El tanto del mediocampista chileno Rodrigo Ureña (73′), con complicidad del volante visitante Daniel Cataño, quien quedó retratado en la acción, y el desvío del defensa Óscar Vanegas, le dio los tres puntos a los ‘Pijaos’, quienes agudizaron la crisis de resultados de los ‘Embajadores’; a quienes desde hace ocho partidos se les perdió la brújula. Y, a la fecha, tienen en vilo su clasificación.
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El funcionamiento en líneas generales de la ‘tribu’ fue óptimo, con una solidez defensiva considerable y el constante desdoble por los costados, en los que el austral se hizo importante. Pues pese a oficiar como lateral por derecha, el tanto que le dio el botín a los ‘Musicales’ llegó por el flanco contrario, ante la displicencia en la marca de un desconocido adversario, que lució intranquilo.
Con el triunfo, el onceno comandado por el ibaguereño Hernán Torres Oliveros llegó a 25 puntos de 57 posibles, de los cuales cosechó 12 en las últimas cinco fechas. Es, en la actualidad, el club que mejor está rematando el campeonato en su primera fase e incluso, de no haber cedido puntos en su visita al Deportivo Pasto, aún tendría grandes posibilidades de meterse a la fiesta de fin de año del FPC.
Ya por el honor, y la opción de dejar la vara aún más alta en la reclasificación, en caso de que se dé una remota opción de avanzar a la fase previa de la Libertadores del 2023, los de la ‘Tierra Firme’ despedirán el año en el Polideportivo Sur de Envigado: cuando visiten al conjunto ‘Naranja’, en un choque que, lo más probable, sea que se dispute en horario distinto al resto de la decisiva jornada.
Durante los primeros minutos en el ‘Coloso de la 37’, en medio de una tarde hostil, la necesidad fue del visitante, que salió a presionar la salida del dueño de casa y de forma rápida se adueñó del útil. Y a los 8′, por el costado derecho, apareció con absoluta libertad el extremo Yúber Quiñones, lo que obligó a la rápida reacción del guardameta William Cuesta, quien apareció para evitar la caída de su valla.
Los acciones pasaron por los pies del volante Daniel Cataño, quien cada vez que tocó el esférico recibió el fuerte repudio de la parcial local. La misma que se acercó en aceptable número ante la campaña protagonizada en el segundo semestre, que lo dejó como eliminado de manera prematura. Poco a poco, los locales se liberaron del asedio y llevaron emoción a campo adversario.
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Sin embargo, en las pocas opciones que tuvo de arrimarse con peligro al marco del guajiro Álvaro Montero, otro de los repudiados por una buena parte de la hinchada, no tuvo mayor efectividad. Como a los 33′, cuando se animó a patear por primera vez al marco bogotano, por intermedio del volante venezolano Yohandry ‘La Perla’ Orozco, quien buscó sorprender al golero rival sin mayor éxito.
Y en el epílogo de la primera mitad, ante algunas de las fragilidades del rival, la intención en ataque de los ‘Musicales’ mejoró. Aunque fue en el arranque de la etapa de complemento que vino con ímpetu la andanada local, como a los 56′, cuando el atacante Juan Fernando Caicedo exigió al golero Montero a sacar las manos y contener un disparo que llevó relativo riesgo en el marco ‘Embajador’.
Con la entrada del extremo Luis Miranda por Orozco, quien decreció en su nivel, los anfitriones pretendieron explotar la banda derecha. Pero antes de que empezara a dar frutos la modificación, el ‘Vinotinto y Oro’ se salvó en dos ocasiones de sufrir la apertura del marcador: primero con un tiro libre de Daniel Ruiz que pegó en los palos (65′) y luego con el volante Juan Carlos Pereira (71′).
Pero como dice el dicho: el que no los hace, los ve hacer. Y muy pronto, a los 73′, los ‘Pijaos’ marcaron la diferencia en la pizarra. Una jugada lícita del volante chileno Rodrigo Ureña, quien con su hombro sacó del camino al criticado Cataño, terminó al fondo de las piolas. Y cómo no, pues sacó un potente ‘riflazo’ que se desvió en el defensor central Óscar Vanegas, ante el desconcierto de Montero.
Con la ventaja a su favor, el técnico Hernán Torres cerró la ‘compuerta’ y mandó al central Julián Quiñones a cuidar el resultado, por el mediapunta Kevin Pérez. Y a fe que le salió, pues ante la incesante réplica de los bogotanos, quienes se volcaron con todo e hicieron figura a Cuesta, fue necesario reforzar el muro defensivo de los tolimenses, que aguantaron y se quedaron con los puntos.
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