En julio, cuando comenzó el caso, Hacienda consideraba que el 10 de la Selección Colombia y su agente Jorge Mendes habían cometido el delito de fraude fiscal y trasladó la investigación a la Unidad de Delito, explica el diario madrileño.
El eje de la investigación se remonta al fichaje del cucuteño por el Real Madrid. Entonces James “presentó su declaración como no residente en España durante ese año y Hacienda abrió una inspección para determinar si podía gozar de dicha condición”, dado que un ciudadano “pasa a ser residente fiscal […] si vive 183 días o si ha trasladado su centro de actividad económica a España”, detalla El Mundo.
Con la documentación que aportó la defensa del futbolista, el Fisco reconsideró y concluyó que simplemente hay una “diferencia técnica de criterio” y tasó la deuda del colombiano en 3,6 millones de euros más 400.000 de intereses.
Según el diario, el colombiano no se conformaría con esta decisión e iría “a los tribunales para defender que su tributación en 2014 fue correcta”.
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