La carrera de James Rodríguez ha estado marcada en los últimos años por los altibajos que ha tenido en su nivel futbolístico. Después de la cúspide futbolística que logró obtener en 2014 y 2015, el colombiano no pudo retomar la competitividad que consiguió en esos años y ha visto cómo su prestigio ha decaído con el paso del tiempo.
Una situación que evidencia este mal momento es que con 30 años, una edad ideal para cualquier futbolista de élite, decidió irse a jugar en la liga de Catar, una competencia casi amateur en la que ha disminuido su nivel notoriamente.
Esto se refleja también en los cambios de valor en el mercado que ha tenido en los últimos años, pues desde 2018 James se ha devaluado en 65 millones de euros, según la página especializada Transfermarkt.
En abril de 2018, el colombiano que jugaba para el Bayern Múnich estaba avaluado en una cifra aproximada a los 80 millones de euros, mismo valor que alcanzó en 2015 y 2017 cuando llegó al Real Madrid. Sin embargo, sus pocos minutos con Zidane en su regreso al cuadro ‘Merengue’ y sus constantes lesiones, terminaron llevando a que el equipo español lo cediera gratis al Everton de Inglaterra.
Ese traspaso hizo que James siguiera con su declive, aunque tuvo un buen primer torneo en Inglaterra, no fue suficiente ya que el técnico que lo llevó a ese equipo, Carlo Ancelotti, salió del club y llegó Rafa Benítez, con quien el colombiano ha tenido serias diferencias desde que lo dirigió en el Real Madrid.
Todo eso terminó llevando a James a salir del club y a tomar la sorpresiva decisión de marcharse al fútbol de Catar. El Al-Rayyan decidió ficharlo y su prestigio se vino al piso, pues el valor de mercado quedó en 15 millones de euros, una cifra muy lejana a la que alcanzó en 2018.
Ahora James tiene entre sus planes salir de territorio asiático y regresar a Europa. Incluso, ya hay tres equipos del viejo continente que planean presentar una oferta por el colombiano.
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